Pensaba Turki que lo había visto todo
Los jugadores rompen con su afición
LA OPINIÓN DEL PARTIDO: Hay que tener claro que la culpa no la tienen los entrenadores y son los futbolistas los que han protagonizado uno de los ridículos sonados en la historia de la entidad rojiblanca, Si Turki Al-Sheikh pensaba que lo había visto todo le quedaba este partido ante un recién llegado a la categoría. No tiene la culpa Rubi ni Vicente Moreno ni Garitano. La plantilla es la misma con futbolistas acomodaos que van al partido como el que va al Paseo Marítimo instalado en el confort. Los aficionados no se lo merecen ni el entrenador ni el presidente pero es que son los favoritos para el ascenso y se les permite todo hasta la falta de actitud ante rivales flojos en defensa como el Castellón. Los han dejado en calzoncillos ante su público y son la comidilla de España entera pero no les duele como a sus aficionados que siguen viendo caer al equipo y asomarse al abismo. Habla Rubi de una mini crisis y es más gorda de lo que dice porque no hay intensidad en los partidos y salvo el espejismo de las tres primeras jornadas han vuelto a saltar al campo sobrados.
Pensaba Turki que lo había visto todo y faltaba el partido contra el Castellón del que avisaba el entrenador y justificaba en sala de prensa que le había dedicado un trabajo especial al que sus futbolistas no le hicieron ni caso a tenor del desarrollo del encuentro. Rubi no tiene un director de juego y no acierta con los que saca porque da lo mismo al que saque. No es cuestión de piezas es de concepto y si no salen enchufados y le ponen ganas ni hay nada que hacer. Son todos parejos a la hora de hablar de intensidad. Son los favoritos: que corra otro.
Jugadores
Si algo tenemos claro después de ver al Castellón dejar en calzoncillos al Almería es que los culpables son los futbolistas que salen del hotel con el partido perdido porque al final se han creído eso de que son favoritos cuando solo son los más caros de la historia. Los mejor pagados de la categoría y con ello no basta. Los aficionados se hartan de ellos porque son los mismos de la pasada campaña y nadie hace nada. Rubi se los pidió a todos esperando un paso al frente que no llega porque tienen la vida resuelta y siguen paseando sus buenos contratos y sus cláusulas millonarias. El partido contra el Castellón ha sido la ruptura con una afición fiel que esperaba mucho de ellos pero tras una salida de caballo potro han frenado como un burro penco.
Entrenadores
Esta plantilla ha sido dirigida por Vicente Moreno, Gaizka Garitano, Alberto Lasarte, Pepe Mel, Rubi y el que venga. Da lo mismo. Al que pongan se estrella porque el jugador no aprieta los dientes, no escucha el mensaje del que los dirige y van sobrados por los campos. Fallan goles cantados por falta de convencimiento y ponen hasta las narices al mistes y a los aficionados que no los entienden. Ahora que llamen a otro y luego al siguiente cuando las medidas tienen que ir hacia los futbolistas y no hacia el que los dirige porque no le hacen caso. Los entrenadores no son tontos y los resultados dañan la vista. Espera Rubi un paso al frente tras la peor temporada de la historia y la plantilla se soma al abismo como si tal cosa.
Afición
Lo único que funciona en el Almería es la afición y el equipo no está con ella. Mucho hablar de la grada y van dos partidos con un triste empate ante el Sporting y una mano de pintura en plena cara que le ha dado el Castellón. Se hace inaguantable para el abonado y para el aficionado ver a estos jugadores que no dan la talla y siguen su caída hasta que alguien los pare en seco. El equipo no está con la afición y se lo deben mirar los capitanes y toda la tropa que se viste en el vestuario del Almería. Lo del Castellón puede ser un accidente pero la pasada temporada deja muy claro que los futbolistas más caros de la historia no dan la talla.
El Castellón deja al Almería en cueros vivos.
Tony Fernández
Redactor de Deportes de SER Almería. Llegó a la SER en 1996. Antes, en RNE. Más de 40 años de experiencia...