Se dispara en Málaga la demanda de casas móviles por parte de parejas jóvenes que no pueden acceder al mercado tradicional

Málaga

Las ‘mobil homes’ o casas móviles son viviendas prefabricadas que se pueden reubicar sin necesidad de desmontarlas, es decir, las puedes trasladar de un lado a otro con la ayuda de un remolque. Al contrario que otras viviendas modulares, las ‘mobil homes’ no requieren cimentación ni licencia de obra, lo que abarata todavía más los costes.

A ojos de la ley, son tratadas como bienes muebles, por lo que están reguladas por el artículo 335 del código civil, no requiere permiso de edificación, lo que le otorga ventajas legales como menos trámites burocráticos y requisitos técnicos, aunque hay excepciones: que esta vivienda móvil necesite cimentación o que requiera suministros del ayuntamiento, en ambos casos necesitará de la misma documentación que una vivienda tradicional.

El no tener la consideración de inmueble también incide en la financiación ya que se realiza al margen de los límites de una hipoteca y su tramitación suele ser más rápida y hasta en diez años, eso sí, con los intereses más altos que los hipotecarios.

Desde la empresa Casamóvil Sur, sus responsables, con más de una década de experiencia en el sector, aseguran que, desde la pandemia, ha cambiado el perfil de los demandantes pasando de personas mayores que la utilizaban para el ocio a parejas jóvenes, incluso con menores, que la buscan como vivienda habitual.

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Se trata de viviendas adheridas a un chasis con ruedas. Cuentan con todos los elementos aislantes necesarios y se entregan con el mobiliario, colchones y electrodomésticos, parten de los 36 metros cuadrados y el precio de una casa rodante nueva parte de los 38.000 euros y de los 14.000 si es de segunda mano.

Todo con un mercado en Málaga donde las viviendas de segunda mano rozan los 3.800 euros el metro cuadrado y los alquileres están por encima de los mil euros.

Los responsables de esta empresa mantienen que también ha cambiado la ubicación en la provincia y han pasado de terrenos rústicos en el entorno metropolitano de la capital a zonas de Ronda, Carratraca y la Axarquía.

La Guardia Civil ha detectado un importante aumento de casas prefabricadas instaladas en parcelas del campo. Uno de los motivos que están provocando esta proliferación de nuevas construcciones ilegales son los elevados precios de la vivienda.