Buscando un culpable
Hay un cambio de tono en el discurso oficial andaluz
La Columna de Ángel Munárriz en La Ventana Andalucía (25/09/24)
Sevilla
El mensaje dominante del PP victorioso se ha oscurecido. Ya no hay tanto énfasis en aquello del "milagro andaluz".
¿Lo recuerdan? Íbamos a ser la "Baviera" del sur, a adelantar a Cataluña, a sacarle las pegatinas a Madrid, no iba a haber quien nos frenara. Andalucía había sido un Ferrari sin piloto. Pero eso se acabó con Moreno al volante.
La fórmula era fácil: había que bajar impuestos y quitar burocracia. Ello atraería inversión, lo que permitiría recaudar más impuestos a pesar de bajarlos
La curva de laffer, lo llaman. Tomando esa curva el bólido blanquiverde iba directo al podio. Más riqueza, mejores servicios públicos. Era el discurso del "Gobierno del cambio". Pero, ese discurso, como decía, se ha oscurecido.
Ahora Moreno, que ya venía admitiendo que la sequía complicaba sus planes, lanza un preocupante mensaje sobre la falta de financiación de la Junta para sanidad y educación. Palabras mayores.
¿Qué ha pasado? ¿Por qué este cambio? Andalucía ya estaba infrafinanciada con el PSOE, y lo estaba en los días de optimismo desatado del PP.
Quizás la explicación haya que buscarla en el mapa de la política nacional. Al noreste, concretamente.
Porque todo el discurso oficial se oscurece justo mientras Moreno lo gira más directamente que nunca hacia Cataluña, hacia la "financiación singular", que se erige en el gran tema de la política nacional, y también de la andaluza.
Camino de seis años desde la llegada del PP, Andalucía es última en PIB per cápita y la sanidad renquea. Por el tiempo transcurrido, el discurso de la "herencia recibida" pierde fuerza. Así que urge buscar soluciones... o nuevos culpables.
Y la "financiación singular" catalana, el llamado "cupo", tiene toda la pinta de funcionar a las mil maravillas como culpable de los problemas de motor del Ferrari andaluz.
Ángel Munárriz
Periodista de 'El País'.