¿Tienes un pozo en tu casa rural?: así es como puedes obtener agua potable en Granada
La empresa granadina H2O Tratamientos, con sede en Albolote, cuenta con expertos que ayudan a garantizar una buena potabilización con recursos propios
Pozo tradicional en domicilio particular / Paolo Gallo Modena
Granada
Quien tiene una casa en el campo tiene un tesoro. Y si ésta, además, cuenta con un pozo propio, la riqueza es inmensa (especialmente en tiempos de sequía). Toda la vida se ha hecho uso de los pozos como principal fuente de riego, pero la escasez hídrica ha obligado a más de uno a plantearse la opción de potabilizar esa agua para el consumo doméstico. Con ayuda de los expertos de H2O Tratamientos, empresa granadina con sede en (Albolote), vamos a contarte los pasos necesarios para conseguirlo.
Calidad del terreno y del agua
El primer consejo antes de iniciar cualquier tratamiento de agua en un pozo es consultar la normativa vigente. Y luego, tener muy presente que un agua clara no significa que sea segura. En ella pueden habitar parásitos como la Giardia o el Cryptosporidium, que tampoco alteran el olor o el sabor, pero ahí están. Cualquier pozo puede estar afectados por vertidos cercanos a la propiedad o porque en la zona se realizaron actividades industriales contaminantes años atrás.
Por eso, lo primero que hay que hacer es analizar el agua. “En Tratamientos H2O llevamos la muestra al laboratorio inmediatamente después de su recogida para obtener resultados fiables”, explica su director comercial, Juan Ávila. Este análisis del agua “nos revelará la composición del agua de cada pozo y, en consecuencia, actuar de forma más precisa en su potabilización”, añade Ávila.
Estudios y herramientas para la potabilización del agua / Anawt Sudchanham
Primer paso: la cloración
Para decir adiós a esos “inquilinos” indeseados hay que empezar por la desinfección del agua. El método consiste en instalar un sistema de cloración completo que realiza eficazmente la eliminación de microorganismos que presentan riesgos para nuestra salud.
El filtro de turbidez
El siguiente paso es eliminar cualquier partícula en suspensión que supere los límites permitidos. Estas partículas, además de enturbiar el agua, propagan la contaminación a través de ciertos metales pesados, compuestos orgánicos y pesticidas.
La turbidez se mide en Unidades Nefelométricas de Turbidez (UNF). Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el agua para consumo humano no debe superar las 5 NTU ni estar por debajo de 1 NTU. “Obtener la medida real de turbidez es otro de los objetivos del análisis en laboratorio y nos permite decidir cuál es el tipo de filtro más adecuado para cada pozo”, explica Fabien Sené, director de la división industrial de H2O Tratamientos.
La función del descalificador
De sobra conocidas son las bondades de los descalcificadores tanto para uso industrial como doméstico. Este tipo de equipos se encargan de eliminar el exceso de magnesio y calcio (lo que conocemos como cal), evitando las averías asociadas a las incrustaciones y la corrosión. Además, gracias a su capacidad para reducir la dureza del agua, protege el pH de la piel y ayuda a prevenir la dermatitis atópica.
El descalcificador será recomendado siempre que los niveles de dureza del agua puedan afectar al buen funcionamiento de tu instalación. En H2O Tratamientos recalcan que, cuando el agua del pozo pasa por el descalcificador, estamos suministrando a la vivienda un agua óptima para el funcionamiento de nuestros electrodomésticos.
Quinto paso: la bomba de presión
Ahora solo hay que hacerla llegar a la casa. Para ello se necesita un grupo de presión con una o varias bombas (dependiendo del volumen de agua y distancia que deba recorrer) que aspiran el agua y la propulsan mediante tubos hacia donde queramos. Por ejemplo, puedes instalar una salida para los usos domésticos y otra para regar el jardín.
Además, el sistema de cloración completo incluye un depósito de almacenamiento con capacidad adecuada a las necesidades de cada vivienda.
Agua de calidad con un equipo de ósmosis
Es indudable la eficacia de la ósmosis inversa como método para obtener agua de gran calidad, tal y como avala la propia OMS. Este sistema se instala en la cocina y está especialmente indicado para personas vulnerables (con condiciones médicas renales, hipertensión u osteoporosis o de edad avanzada).
Pero no vale cualquier depuradora. Asegúrate de que el equipo de ósmosis que instales en tu hogar realice las 5 etapas necesarias de filtración, con el fin de eliminar la gran mayoría de sustancias nocivas que puedan haberse adherido al agua a través de las tuberías.
En definitiva, si tienes una casa rural con pozo y sueñas con convertirla en agua potable acude a la empresa experta Tratamientos H2O para hacerlo realidad y, sobre todo, evitar cualquier foco de infección que pueda poner en riesgo tu salud y la de los tuyos.
Infografía sobre cómo potabilizar el agua de un pozo / H2O Tratamientos