Jaén

Casi ocho meses después el Real Jaén volvía a perder en Liga regular. No lo hacían los blancos desde el pasado 9 de marzo de 2024 frente al Atlético Malagueño en un partido que precisamente supuso la destitución de Emilio Fajardo como entrenador. Un técnico que este pasado domingo se sentaba en el banquillo del Motril para infligir a los blancos su primera derrota en Liga y que para Robero Peragón "no es una hecatombe, simplemente una piedra de toque en el camino".

Sobre el césped y con los aficionados motrileños todavía celebrando la victoria, el entrenador blanco señaló que estaba todo yendo sobre lo previsto, "de cara, incluso los resultados de otros campos" y la verdad que el final ha sido "una pena". "El equipo estaba haciendo cosas muy bien, muy interesantes. A partido largo teníamos más motivos, incluso en momentos hemos dominado, pero al final es muy difícil en estos campos que es muy difícil practicar el juego que nosotros proponemos. Pero bueno, las cosas vienen así y estoy muy orgulloso de mis jugadores", ha dicho.

Sobre la jugada clave de la expulsión, Peragón cree que la acción de Óscar "es más aparatosa que la intencionalidad", pero "a partir de ahí poco que hacer". "No ha tenido lógica porque ha sido un balón por alto en disputa, que le ha dado arriba en la cabeza y no hay duda, pero no creo que Óscar tenga ninguna intención de agresión, pero bueno al final va con el pie arriba y ya está. Ante eso no digo nada, me parece que ha podido ser expulsión y nada. Pero me preocupa que Mario se haya ido meando sangre por un golpe aquí (en el costado) que no ha sido ni falta y ese tipo de cosas en un partido en el que estamos jugándonos el campeonato, por lo que al final hay que sacar puntos en todos sitios, pero hoy parece que no era", ha explicado.

Cambios en el descanso

Peragón también intentó explicar qué había pretendido con los cambios del descanso y si se reprochaba algo por lo que ocurrió en la segunda parte. "Cambiar un jugador que está meando sangre no puedo reprocharme nada. Al final he intentado reforzar la medular para ese golpeo directo suyo, porque su propuesta es a través de juego directo y me reprocho que el gol nos lo han hecho en una transición de un saque de banda a favor nuestro y eso me ha dolido porque al final queríamos hacer ataques largos y aguantar el partido para que ellos se bloquearan si no tenían juego, pero bueno, este campo no es el mío, la otra vez que vine me rompí una rodilla y hoy hemos perdido", ha aclarado.

Por último, el técnico blanco ha asegurado que se va jodido porque el equipo viene de una dinámica "muy buena, trabaja muy bien, y hoy se ha puesto todo en contra desde la jugada de la expulsión". "Todo estaba yendo según lo previsto pero es difícil practicar el juego por las condiciones del campo, aunque no es excusa. Orgulloso de los jugadores que han salido porque no han perdido la cara en todo momento. Esto es un juego, a veces es más justo, otras más injusto, pero también se pierde, deben ser cosas del destino porque la última vez que vine a este campo me fui con un ligamento menos y a partir de ahí yo continué jugando al fútbol y haciendo cosas bien. A ver si puede ser un punto de inflexión. Esto no es una hecatombe, ni nada, simplemente una piedra de toque en el camino y ha sido una pena porque creo que 11 contra 11 el partido no se nos escapa", ha finalizado.