Molo: primera experiencia con un filial

Manuel Jesús Casas, ‘Molo’, afronta una nueva aventura en los banquillos con un filial de Primera División. Llegó al Deportivo Alavés como recambio de José Manuel Aira para lanzar a la cantera de un equipo que no ha comenzado bien la temporada. Por Vitoria pasaban José María Salmerón como entrenador y Raúl Sánchez, ‘Raulito’, triunfando por Mendizorroza. El último almeriense en pasar por allí fue Salva Sevilla. Ahora es tiempo de Molo para levantar a unos canteranos que tienen abiertas las puertas de la primera plantilla de par en par. No lo ha tenido fácil ni como futbolista ni como técnico este almeriense que apunta a los 40 años cargado de experiencia. Su etapa de jugador no queda tan lejos siendo un central que anotaba muchos goles en la portería rival. Llegó a la cantera del Almería y pasó por la división de bronce con equipos como Guijuelo, Real Murcia, UCAM, Lorca y Lleida, donde logró triunfar y llevar su brazalete de capitán.

Como entrenador ha pasado por el Poli Ejido, Lleida, Águilas, UCAM Murcia y Tarazona. Ahora llega su primera experiencia con un equipo filial en 2ª RFEF que no es muy conocido por el almeriense pero el balón es universal. Salido de la cantera y con muchos cursos en el Almería B en su etapa de futbolista, no le vendrá grande adiestrar a unos jóvenes valores que tienen la Primera División a solo un paso.

Canterano

El entrenador del Alavés B no es nuevo en el apartado del fútbol base, ya que salía de él. Sus años en el Oriente, luego San Isidro o Almería B solo fueron la primera piedra porque saltó al Villarreal B y Osasuna B siempre como central. Seguro que su paso con las botas puestas le ayudará a entender toda la filosofía de un vestuario donde lo primero que toca es controlar los ecos de una plantilla que lucha por dar el salto a la élite y contar para Luis García Plaza. Todo lo aprendido en su etapa de futbolista le valdrá para transmitir lo que busca en una entidad donde la exigencia es alta y va a por el segundo entrenador de la presente temporada, puesto que José Manuel Aira con el equipo en puestos de descenso era despedido. Como el carácter le viene de serie a Molo, todo apunta a que su vuelta a los banquillos será positiva porque llevaba tiempo con la maleta preparada para volver con toda su fuerza a los banquillos.

Profesional

Trabajar con ‘niños’ tiene sus dificultades. El vestuario que ahora dirige nada tiene que ver con el del Lleida, UCAM o Águilas donde se le pedía un ascenso de categoría. En Vitoria lo importante es sacar jugadores para el primer equipo pero sin olvidar que se compite para ganar partidos y con Molo en los resultados va el pan y el contrato. Con la ilusión por bandera y siendo mejor entrenador que hace una década toca afrontar un reto de nivel alto porque trabajar en el Alavés implica un plus de responsabilidad por la historia de la entidad que obliga mucho. No ha cruzado España por casualidad y si firmó en Vitoria lo hizo convencido de que va a levantar el vuelo de un equipo capacitado para ello pero que no ha tenido un buen comienzo de temporada.