Moreno, un paso por detrás de sus rivales (por primera vez en seis años)
Hoy hay tres gerentes del Servicio Andaluz de Salud imputados por el juez que hace una semana no lo estaban
La Columna de Dani Cela (20/11/24)
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Sevilla
El Gobierno andaluz se inclina ya por personarse en la causa judicial de los contratos a dedo tras el shock de ver cómo imputaban a su actual gerente del SAS sin saber de qué y cómo defenderse.
El Gobierno andaluz está midiendo el momento procesal adecuado para personarse en la causa que investiga por un supuesto delito de prevaricación la adjudicación de casi 300 millones de euros con contratos a dedo a clínicas privadas entre 2020 y 2024.
Hoy está más cerca de esa posibilidad que hace una semana. Hoy hay tres gerentes del Servicio Andaluz de Salud imputados por el juez que hace una semana no lo estaban.
Pero la decisión de poner un pie en los tribunales, incluso como parte perjudicada, no es fácil. Políticamente supone para el Gobierno de Juan Manuel Moreno reconocer indicios delictivos penales donde hasta ahora no había nada, o había un escándalo fake, o barro salpicado por un PSOE en horas bajas, o, a lo sumo, errores administrativos.
En el Ejecutivo andaluz hay voces que defienden que este caso se va a desmoronar como un castillo de naipes. Y otras voces, veteranas de un PP que pilotó la estrategia política del caso ERE, que se tientan el traje: una causa judicial se sabe cómo empieza, pero no cómo acaba, dicen.
La imputación de la actual gerente del SAS, Valle García, causó un shock en San Telmo. No se lo esperaban, no lo entendían, no tenían notificación del juzgado, no conocían la querella del PSOE, no tienen información. Y si en algo se ha distinguido el Ejecutivo de Moreno, estos seis años, ha sido en ir un paso por delante de sus rivales, gracias al control absoluto de la información.
El “ir a ciegas” es lo que está abriendo paso a la opción de personarse en la causa.
En ese siguiente capítulo, vuelvan a escuchar la defensa cerrada de la portavoz de la Junta a la actual gerente del SAS, y el silencio atronador respecto a sus dos antecesores.
Uno de ellos, Miguel Ángel Guzmán, fue número dos de la Consejería de Salud hasta hace menos de un año, y firmó el expediente de emergencia del que emanan todos los contratos a dedo bajo sospecha. La portavoz de la Junta ha recordado que ya no está en el Gobierno andaluz. Efectivamente, tres meses después de su cese, Guzmán fichó por una de las empresas privadas a las que había adjudicado a dedo 44 millones de euros. Mucho ojo ahí.
