Continúan las actividades con motivo del X aniversario de la Bendición del Señor de ‘La Borriquilla’ de Jódar
Charla sobre ‘Los profetas anuncian la Entrada de Jesús en Jerusalén’ a cargo de Pedro Aranda, doctor en Teología Bíblica y párroco de Valderrubio, Escoznar y Obeilar, en la provincia de Granada
Continúan las actividades con motivo del X aniversario de la Bendición del Señor de ‘La Borriquilla’ de Jódar
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Jódar
Dentro de los actos del X Aniversario de la Bendición del Señor de la ‘Borriquilla’ de Jódar, el viernes 22 de noviembre, a las 18:30 horas (6:30 de la tarde), en el Salón de Actos del Centro Parroquial del Santo Cristo, charla LOS PROFETAS ANUNCIAN LA ENTRADA DE JESÚS EN JERUSALÉN'' a cargo de D. Pedro Aranda, Doctor en Teología Bíblica y párroco de Valderrubio, Escoznar y Obeilar, en la provincia de Granada.
Organiza: Grupo Parroquial de Jesús en su Entrada Triunfal en Jerusalén y María Santísima de la Paz.
Colabora: Radio Jódar SER
El conferenciante, Pedro Aranda, resumía ante nuestros micrófonos el contenido de la charla, “… He querido asomarme a aquellas páginas del Antiguo Testamento que mejor nos pueden entender qué momento vivió Jesús junto a sus discípulos y aquella multitud que desde Jericó los acompañaba ante esa presencia en la ciudad de Jerusalén con motivo de la fiesta que iba a celebrar. Jesús había visitado en muchas ocasiones Jerusalén con motivo de la fiesta, también en esos años de ministerio. Jesús se había acercado a la ciudad, pero la expectativa, lo que se había creado y cómo Jesús había dispuesto tanto en ese camino con los anuncios de la pasión como en todos los detalles que sabe cuidar con esmero a la hora de elegir una asna, de saber que esa asna tenía que ir con un pollino porque era señal de pureza, por lo tanto él la podía montar, no iba a quedar impuro, que para los judíos de aquel tiempo pues eso se cuidaba mucho. Sabe disponer todo para que identifiquen en lo que está haciendo, que ha venido el Mesías, que él es el rey, pero un rey muy distinto a la expectativa que tenían pues muchos de los que lo acompañaba, que se quedaban limitados en lo que se podía conseguir, podríamos decir, de asalto al poder del imperio romano, como una liberación a semejanza de la que había supuesto para el pueblo de Israel la salida de Egipto, que recoge el libro del éxodo, por lo tanto Jesús cuida y ayuda a través de los salmos de los profetas a que entiendan, a que sepan leer todo lo que va a hacer. - O sea, lo hace consciente de lo que habían profetizado, de lo que se había escrito previamente a él -. Sí, precisamente gracias a eso ellos, la gente, en ese momento van a poder acompañarlo, pero después, sobre todo después de la resurrección, después de esos días, van a saber encajarlo perfectamente, van a saber descifrar, no en ese momento, lo dirán muchas veces Juan, hasta que no sucedió pues la muerte y resurrección, no pudieron entender bien todo aquello que les quería transmitir Jesús con signos, con gestos y también con palabras y que se les escapaba, pero Jesús acude a esa gran celebración que suponía la fiesta de la Pascua, sabiendo con toda conciencia aquello que iba a ser esa entrada, iba a ser entregar su propia vida. - Sí, claro, los discípulos que se resistían a lo que es la muerte, entendiendo que lo más positivo, lo más importante al final era precisamente la resurrección - En los anuncios ya lo había señalado, pero nos dicen los evangelistas que se quedaban bloqueados, al final la palabra muerte, la palabra sufrimiento, estremece el corazón del hombre y aunque después te puedan decir, oye, esto hay una segunda parte, te la voy a explicar, para ellos, aunque habían tenido la experiencia de la transfiguración en el monte tabor, precisamente tres de aquellos discípulos que tenían una mayor relación con Jesús, eran sus predilectos, pero ellos no terminaban tampoco de encajar, porque al final los proyectos los sitúa en la tierra. Ese salto le resultaba complicado, por eso las expectativas son grandes, pero después también la decepción, unos días después, va a ser muy grande. - En cualquier caso es un todo, es un uno, tanto la entrada, como la Semana Santa, la Semana de la Pasión, como la propia resurrección, al final es todo un conjunto. -Sí, precisamente en eso, parece que ha estado en la charla, porque es verdad que lo ha entendido perfectamente, no se entiende esa entrada de Jesús en Jerusalén sin la experiencia de la Pascua, sin la experiencia de la resurrección. Todo lo que quiera explicar en ese día, no va destinado a su muerte, a la anticipación de su muerte, sino sobre todo a la anticipación de la vida, de la victoria, de esa fuerza que quiere mostrar. - Además, hacerlo precisamente desde eso, desde la humildad, desde la sencillez. - Jesús, Dios ha elegido para mostrarse, para revelarse la pobreza, la humildad, poniendo a un niño en medio de los discípulos, diciendo que el que quiera conseguir alcanzar el reino de Dios tiene que hacerse como un niño. Dice que lo que menos cuenta a los ojos de este mundo es lo que es importante y único para Dios.
Sabemos que la familia de Jesús era pobre. Cuando ellos van a la purificación de la Virgen y a presentar a su hijo los 40 días de su nacimiento, la ofrenda que hacen es de unos pichones, es de unas pequeñas palomas. Esa era la ofrenda que recoge el libro del Levítico, que era de los pobres. Por lo tanto, la familia de José y María no podían hacer la ofrenda ni de una oveja, ni de un ternero, que era de las familias más adineradas. Por lo tanto, Dios se ha revelado al mundo a través de la pobreza, siendo el pobre, siendo Jesús mismo pobre. Y ha elegido para mostrar continuamente, desde aquel pesebre en Belén hasta un asna en la entrada en Jerusalén, aquello que anuncia que a través de la pobreza se manifiesta la fuerza de Dios…”.
Acto que se ha hecho coincidir con los actos con motivo de la Solemne Fiesta Principal y Triduo, del 21 al 23 de noviembre. Fiesta Principal el domingo 24, festividad de Cristo Rey.