La metamorfosis de Gui Guedes

En verano de 2022 la UD Almería firmaba a un joven jugador del Vitória de Guimarães. Para todos un desconocido, pero no para Joao Gonçalves, asesor en materia de fichajes. El centrocampista no lo ha tenido fácil porque llegó a un proyecto consolidado en Primera y tuvo que salir cedido para encontrar minutos. Ahora Rubi le ha dado galones y ha pasado de ser un suplente fijo a convertirse en el principal recambio de Baba en la medular. Guilherme Borges Guedes (22 años), se abre camino en un equipo que empieza a maravillar a la afición y también a la categoría. La segunda mitad que hizo contra el Córdoba fue espectacular y tiene su explicación.

Cada historia tiene un comienzo y Gui llegó al Almería hace más de dos años. Nacido en Santa Marta de Penaguiao (Portugal), era su primera experiencia fuera de casa y no lo tuvo nada fácil para encontrar oportunidades. El club lo cedió al CD Lugo en el mercado de invierno y conoció la Segunda, disputando 13 partidos con los gallegos. En 2023 regresaba a Almería, si bien el club optó por un cambio de ciclo que le afectó directamente. No iba a ser protagonista y se fue cedido sin opción de compra al filial del Oporto. Su rendimiento fue positivo con 26 encuentros y un gol en cuenta, marcado a Belenenses.

Oportunidades

Este verano no hubo traspasos en el centro del campo -solo la cesión de Marcos Peña al Marbella-, y él se quedó consciente de que debía sacar matrícula de honor en cada entrenamiento para convencer a Rubi. Tuvo minutos en Oviedo y Zaragoza, mientras que su vida cambió radicalmente a raíz de la primera ronda de Copa contra el San Sebastián de los Reyes. La titularidad le permitió estrenarse en Liga frente al Deportivo por la sanción de Dion Lopy y la lesión de Gonzalo Melero y maravilló a la grada y al técnico. Lejos de quedarse en un mero espejismo, el segundo tiempo que realizó con el Córdoba tras la lesión de Baba confirmó la escalada de un jugador de futuro. De hecho, inició la contra del 2-0.

Proyección

Gui ha pasado de calentar banquillo a ser una de las primeras piezas de Rubi en cuanto Lopy o Baba piden el cambio. Sigue con dorsal del filial (27), pero a todos los efectos es futbolista de Segunda. Su labor es recuperar balones dar salida al equipo y gran parte de culpa de su evolución la tiene el técnico. Ha logrado que el portugués se quite la coraza, que aparque la timidez en el césped y muerda como este martes. "El equipo está con mucha confianza en estos momentos y se nota en el campo. En el segundo recuperé la pelota y montamos la transición rápida para marcar un gol muy bueno", comentó Gui en zona mixta.

Atado

Hasta la fecha solo ha podido jugar siete veces con el primer equipo entre Liga y Copa del Rey, un registro que ira subiendo conforme avance la temporada. Tiene contrato en vigor hasta 2028 y un presente prometedor. Tanto es así que su anterior club se guardó un porcentaje en caso de futura venta por parte del Almería. Respecto a si se ve de inicio en próximos compromisos, "el futuro no lo sé, pero vengo haciendo buenos entrenamientos y en el campo se nota la conexión con el resto de compañeros. El sábado viene un partido especial para nosotros, para la afición".

Salir al Oporto B le dio minutos para volver a Almería con ritmo de competición. La metamorfosis de Gui Guedes, de ser un fijo en el banquillo a primer espada.