Por el mar corren las liebres

Córdoba

El camino de El Bañuelo une Córdoba con Trassierra desde el siglo XV. Figura en el Inventario Municipal desde el año 1884 inscrito con el número 27. Es decir, lleva cinco siglos siendo una vía pública de tránsito y otros 140 años registrado legalmente en el catálogo de caminos locales. La Constitución española protege las vías pecuarias y las veredas antiguas como bienes de dominio público. Quiere decirse que son bienes inalienables que nos pertenecen a todas y a todos.

Un día el propietario de la finca colocó una cancela y echó el candado del camino de El Bañuelo. Dicho en román paladino, se apropió de un bien público que durante siglos perteneció a los caminantes. Se pasó el Inventario Municipal por el arco del triunfo y con la Constitución española se fumó un cigarrito de la risa.

Ante la inacción del Ayuntamiento, un grupo de buenos ciudadanos y ciudadanas efectuó una marcha de protesta y cortó simbólicamente el alambre de espino que había sido colocado ilegalmente en el camino público. ¿Qué cree usted que pasó? En efecto. El infractor persiguió al denunciante y el denunciante fue llevado ante los tribunales.

El caso nos recuerda como dos gotas de agua al del presunto defraudador de Hacienda y el fiscal general del Estado. Usted ya me entiende. Por el mar corren las liebres, por el monte las sardinas, tralará. Pues eso. Que disfrute de un psicodélico año 2025.