En busca de un hogar donde se valoren y respeten sus derechos humanos

Huelva

La historia de Héctor Keungni Tientcheu es la de un joven camerunés que, como muchos otros en África, se vio obligado a abandonar su país debido a la difícil situación política. En 2016, trató de conseguir un visado que le fue, finalmente, denegado. Por eso, Héctor decidió que ya no podía soportar más la situación en Camerún. Así que se arriesgó a atravesar media África en busca de un futuro mejor en España. En su travesía, él mismo ha reconocido con tristeza y dolor cómo muchos de sus compañeros se quedaron en el camino sin lograr llegar a su destino.

Hace nueve años que este joven camerunés llegó a Huelva. Y de las primeras ONGs que le tendieron una mano fue CEPAIM, una organización independiente que trabaja por promover una sociedad inclusiva, cohesionada, igualitaria e intercultural. Héctor, que trabajaba en su país como operador, consiguió aquí, en la Fundación CEPAIM de Huelva, ser una persona beneficiaria del proyecto. Luego se hizo voluntario cuidador y, actualmente, ya ha conseguido un empleo remunerado en una ciudad como Huelva, donde asegura sentirse muy bien acogido.

Héctor, que se arriesgó a venir a España para buscar un lugar donde sus derechos como ser humano fueran respetados, ha conseguido su sueño. Héctor ha tenido que superar dificultades, especialmente en el proceso de regularización, pero finalmente su integración es una realidad y ha sido posible gracias al apoyo de la Fundación Cepaim, donde se convirtió en voluntario cuidador y, actualmente, trabaja en la fundación, demostrando que es una persona agradecida hacia quienes le acogieron cuando llegó a la provincia onubense después de jugarse la vida.

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Ahora, el compromiso de Héctor Keungni es seguir progresando en la vida. Echa de menos a su familia, que sigue en Douala, la segunda ciudad más importante de Camerún. Allí viven sus padres y sus mellizos, un niño y una niña que ahora tienen 12 años. Les visita muy de vez en cuando, pero su siguiente meta es poder traerlos con él a Huelva, donde asegura que está feliz y ha encontrado su lugar en el mundo.