Cazalilla rinde homenaje a la internacional Patricia González 'Peque' en un emotivo acto con las jugadoras locales
Patricia González ofreció una charla y dirigió un entrenamiento al Cazalilla FS femenino.


La localidad jiennense de Cazalilla vivió una jornada muy especial con motivo de la visita de Patricia González 'Peque', destacada jugadora internacional de la selección española de fútbol sala, quien fue recibida con entusiasmo y admiración por parte de vecinos, autoridades y jóvenes deportistas del municipio.
Peque, que debutó con la selección nacional el 28 de marzo de 2009 en un amistoso ante Países Bajos, ha desarrollado una brillante trayectoria con el combinado español, participando en cuatro mundiales y alzándose como campeona de Europa en 2019, 2022 y 2023. Con más de un centenar de partidos y medio centenar de goles con la camiseta nacional, su legado es ya historia del fútbol sala femenino en España. En 2022 fue reconocida como la mejor jugadora del mundo.
El salón de plenos del Ayuntamiento de Cazalilla fue el escenario de una charla-coloquio entre Peque y las jugadoras del Cazalilla Fútbol Sala Femenino, equipo que actualmente atraviesa una excelente temporada y ha conseguido la clasificación para el Campeonato de Andalucía. Durante el acto, se reconoció también la labor de Juan Mateos, vecino de Cazalilla residente en Jaén, por su implicación en el impulso del fútbol sala local. Mateos expresó su admiración por Peque, a quien calificó como “una de las mejores jugadoras que ha dado nuestro país”.
Durante su intervención, Peque animó a las jóvenes deportistas a “disfrutar y divertirse jugando, y si alguna vez dejan de sentirlo, buscar un deporte que les proporcione satisfacción personal”. La internacional recibió diversos obsequios en agradecimiento por su visita.
La jornada continuó en el polideportivo del colegio del municipio, donde la jugadora dirigió una sesión de entrenamiento con las jóvenes promesas del fútbol sala cazalillero. El alcalde de la localidad, Manuel Raya, agradeció públicamente su presencia y le entregó como recuerdo una tradicional "pava" de peluche, símbolo del pueblo, coincidiendo con la celebración del cumpleaños de Peque al día siguiente.




