Francisco es el hombre

Almería

LA OPINIÓN DEL DÍA: Si el Almería quiere no tirar la temporada a la basura tiene que reaccionar de forma inmediata y dar un golpe de timón a una situación insostenible. Vienen dos partidos en casa que van a ser un calvario para el equipo y su entrenador, si no lo remedia antes el club. Los aficionados no creen en el entrenador catalán y menos en los futbolistas que expresamente se pidió para el ascenso. Mantener a Rubi no te garantiza luchar por la Primera y la llegada de un nuevo entrenador aportaría ilusión a la plantilla y a toda la provincia. Pero no se trata de uno cualquiera de esos que vienen ‘del otro mundo’. Lo tenemos en El Toyo viendo fútbol con su equipo A preparado para volver al club de sus amores. El hombre es Francisco y el tiempo juega en contra porque para entrar en la lucha por la Primera, el Mediterráneo juega su papel y a día de hoy la afición está desencantada con los jugadores y el cuerpo técnico, y se espera un ambiente hostil para recibir a un equipo goleado doblemente por el Castellón: (2-5 y 4-1). De pena.

Si el Almería quiere venderse como club de Primera no se puede cruzar de brazos y entender que no ha acertado con Rubi, como el catalán sabe que se ha equivocado y no piensa dimitir. Hay que valorar el importe de su finiquito y lo que reporta la Primera: o el intento de conseguirla. Ese hombre de club con competencias en la plantilla está cerca de eso que se llama fracasar y en Castellón ha dejado de hablar de ascenso directo, viendo un Almería roto y sin soluciones desde el banquillo donde su staff no corrige y él no transmite. Hay que buscar un revulsivo porque ya son muchas jornada de lo mismo y su mensaje no ‘cuela’. Mohamed El Assy espera una llamada de Arabia para tomar una decisión que Rubi ni la espera ni se la plantea. Cualquier club de Segunda ya habría prescindido del entrenador como hizo el Real Oviedo cuando vio peligrar el ascenso con un Javi Calleja que no les ofrecía confianza.

Por el Almería que no quede, y que Francisco venga para lo que queda de temporada y otra opcional en función de Play Off y ascenso. Hay que dejarse de contratos de larga duración que cuestan mucho dinero y solo garantizan que el inquilino del banquillo se ‘forre’. Ya no queda tiempo de lamentar y toca agitar el vestuario y buscar algo nuevo. Otro mensaje. Aire fresco y romper ese más de lo mismo que ha condenado a Rubi. Su falta de autocrítica es alarmante.

Francisco

Todo son ventajas porque conoce el club, a la plantilla, y ha visto todos los partidos del Almería y como cualquier almeriense sabe donde radica el problema. Son solo 6 partidos. Así llegó Rubi al Almería y no lo consiguió, pero Francisco tiene ganas y no irá solo en la aventura como lo harán los futbolistas y Rubi de no llegar la decisión más esperada. Una reacción inmediata para cambiarlo todo es lo que necesita el Almería y todo lo demás sobra. El preparador catalán pide a gritos el relevo empecinado en una alineación para los mismos, y unos cambios tarde y mal, de los que no habla. El equipo ofrece una imagen penosa. Hasta habló de lo físico el catalán en Castellón, como si no fuera con él la puesta a punto de sus muchachos: Esto lo puede cambiar Francisco.

Rubi

El único entrenador en la etapa Turki Al-Sheikh con competencias y decisión a la hora de confeccionar la plantilla no ha sabido gestionar el éxito de un equipo lanzado hacia Primera y algo debió pasar en Navidad con la llegada de Lázaro y Selvi Clua. El primero juega siempre y el segundo a ratos. Menudos refuerzos para un entrenador con mando en plaza. Le dieron al brasileño como el extremo pretendido y ‘cerró el pico’ como a Clua que tiene futuro y escaso presente. Lo peor es que no salen los jugadores mejores o más en forma, porque la alineación tiene puestos fijos y solo cambia a Sergio Arribas y a los laterales izquierdos. Hombres válidos como Pozo se han perdido del mapa y en la portería Maximiano aunque le caiga el larguero encima. Da .lo mismo que ‘cante’ sigue fijo.. La segunda etapa de Rubi en el Almería no ha salido bien. Francisco ya.