El Mediterráneo pide su Puerta Rojas
Leyendas del Almería, eternas en cada acceso

Las puertas del Mediterráneo deben recordar a grandes leyendas. / UD Almería

Almería
El último que se ha puesto manos a la obra ha sido el Real Oviedo, que el pasado domingo estrenaba dos puertas en el Nuevo Tartiere con denominación de origen. Con los nombres de Lalo y Lafuente para la eternidad. Se trata de una bonita forma de hacer perdurar en el tiempo el nombre de las leyendas del club y en Almería hay muchos candidatos para poner su nombre a esas puertas por las que pasan cada día de partido, y a día de hoy son un número sin alma. La primera debe de llevar el nombre de Juan Rojas porque acabó con la división del fútbol en Almería creando la Unión Deportiva que no pudo conocer en vida. Como futbolista llevó la camiseta del Almería desde Regional a Primera y pocos tan queridos como él en la ciudad a la que tanto amaba. Juan Rojas Peña tiene que ser el primero. Una puerta en la Tribuna por la que pasen las embajadas de los clubes que nos visitan. La mejor y que ponga como la de Lalo en Oviedo su nombre competitivo, como siempre conocimos a los futbolistas: Rojas. El Mediterráneo, listo para honrar a sus héroes
Como el campo va a ser remodelado y tendrá mayor capacidad, seguro que se verá aumentado el número de puertas y habrá más candidatos para dejar su nombre para la eternidad. Nunca antes se hizo en Almería, y va siendo hora de copiar todo lo bueno que tiene el fútbol. Se trata de ponerse a la altura de los mejores clubes de LaLiga y llevar a las nuevas generaciones el recuerdo de los que hicieron un largo camino para llevar al Almería al lugar que ahora ocupa. Suele pasar en esta tierra rendir los homenajes cuando el protagonista está en el otro mundo, pero más vale tarde, y que cada abonado acceda al campo por la puerta de uno de los grandes: mejor futbolistas, pero eso que lo decida el club.
Hay tantos jugadores nacidos en Almería que hayan dejado una huella imborrable que van a faltar puertas, pero la imaginación al poder, que seguro que algo se le ocurre a Mohamed El Assy para inaugurar las obras de la ampliación con una previa de antología bautizando cada una de las puertas del Mediterráneo. Hay que empezar por la puerta Rojas. Hay una larga lista de nombres, pero para no dejar atrás a nadie que los elija el Almería. Sirvan de ejemplo cuatro leyendas. Dos viven y dos nos dejaron. Maxi y Gregorio podrán asistir a la inauguración.
Rojas
Nacido en el corazón del Barrio Alto marcó época en el fútbol almeriense con una sola experiencia fuera de casa en el Calvo Sotelo de Puertollano. Volvió a Almería para defender al Plus Ultra y con el nacimiento de la Agrupación Deportiva Almería formó parte de su primera plantilla y hasta de la última, pero ya en calidad de hombre de club. Jugó en Regional Preferente y Primera División y marcó el primero de los goles en esta ciudad con el equipo en la máxima categoría. Rojas fue el eterno capitán, entrenador, secretario técnico… Todo lo que le pedía el Almería, allí estaba. Cuando entró en el Ayuntamiento como concejal de Deportes no paró hasta acabar con la ‘guerra’ Poli-Ceefe y dar vida al club que ahora nos representa.
Maxi
José Antonio Rodríguez Callejón fue un futbolista que pasó de Tercera a Primera gracias a una eliminatoria de la Copa del Rey. Fue un flechazo para Sabino Barinaga y del talquín del Estadio de La Falange pasó a los grandes templos de España con el Real Oviedo, llegando a marcar al mítico Johan Cruyff. Conocido como Maxi volvía a su Almería para conseguir el ascenso de la historia y defender la rojiblanca en Primera. Valía para todo en el centro del campo y como lateral acabó su etapa. Inolvidable por ese equilibrio entre jugador guerrero y técnico.
Polo
Los que tuvieron la fortuna de verlo jugar con la camiseta del Almería nunca lo olvidarán. Era Salustiano Polo Lázaro un jugador total. Su paso por la cantera del Real Madrid le valió para multiplicar las cualidades innatas y hacer famoso ese regate seco que tanto aplaudían los seguidores de aquellos Almerías de Tercera, Segunda B y una categoría de plata donde sentó cátedra. El menor de los Polo era un artista de la pelota y tenía claro que correr no lo era todo y apostaba a la técnica para ayudar a su equipo, con una calidad pocas veces vista en una plantilla del Almería donde Maguregui pedía: guerreros. Qué bueno era Polo. Por Dios.
Gregorio
Nacido en Madrid vino de Granada y se quedó para siempre. Es tan almeriense como cualquiera de nosotros y sus goles se pueden consultar y revivir. Se decía que marcaba lo imposible y fallaba lo fácil pero no le sacaba del área ni la grúa. Era muy bueno de cabeza y los centros del ‘Chiquitillo’ (como denominaba a Rojas) los sabía aprovechar. También Polo le daba pases de gol al pie que sabía aprovechar. Nada haría más feliz a Gregorio que tener una puerta en el Mediterráneo porque es del Almería por los siglos de los siglos.

Tony Fernández
Redactor de Deportes de SER Almería. Llegó a la SER en 1996. Antes, en RNE. Más de 40 años de experiencia...




