El juez Serrano, ante el juez
Vox irrumpió en Andalucía con un candidato que venía a limpiar la política y que será juzgado por fraude dentro de un año

La Columna de Ángel Munárriz (13/05/25)
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Sevilla
Vox irrumpió en 2018 en la política española por la puerta de Andalucía.
Lo hizo a caballo, con un candidato juez, juez justiciero, que venía a limpiar la política andaluza y a acabar con las "paguitas".
¿Se acuerdan?
Era Francisco Serrano.
Pues ya hay fecha para el juicio por fraude de subvenciones que sentará en el banquillo a tan probo funcionario, hoy abogado de familia. Será en mayo de 2026.
El que fue juez estrella de Vox deberá responder por haber montado una empresa con un socio, haberse levantado casi 2,5 millones de euros en una subvención pública y ni haber destinado el dinero, o no todo, al fin para el que fue entregado—la construcción de una fábrica de biocombustible—, ni tampoco haberlo devuelto al Ministerio de Industria.
¿Dónde está el dinero? Esa es una de las preguntas clave del caso.
El azote de las "paguitas", que se declara inocente, tendrá que explicarle al juez dónde acabó su "paguita".
También debería dar explicaciones Vox, que nos coló como adalid contra la corrupción a un candidato que ha acabado con la Fiscalía pidiéndole hasta ocho años de cárcel.
Pero Vox no da ni media explicación.
Ni de eso, ni de la multa de 862.000 euros que le acaba de imponer el Tribunal de Cuentas por financiación irregular. No da explicaciones de nada, en realidad.
Vox no explica. Vox miente, insulta y se victimiza.
Y consigue instalarse en la impunidad. Que la bandera lo tape todo.

Ángel Munárriz
Periodista de 'El País'.




