A la LVII edición del Premio Ateneo de Sevilla concurren 215 novelas
La editorial Almuzara, que dirige Manuel Pimentel, convoca el premio junto al Ateneo y será la encargada de publicar las obras ganadoras
Fachada de la sede del Ateneo de Sevilla
Sevilla
A la LVII edición del Premio de Novela Ateneo de Sevilla, dotado con 25.000 euros y que se falla este jueves en la capital andaluza durante una cena de gala en el Alcázar, se han presentado 215 obras, de las que se han seleccionado seis en las que predomina del género negro.
También se fallará el Premio de Novela Ateneo Joven al que, en su XXX edición y dotado con 5.000 euros, se han presentado 16 obras.
En esta edición, por primera vez, la editorial Almuzara, que dirige Manuel Pimentel, convoca el premio junto al Ateneo y será la encargada de publicar las obras ganadoras.
Pimentel, que ha dicho que varias de las novelas seleccionadas podían ganar el premio por su elevada calidad literaria, ha asegurado que, dada la importancia del premio y su recorrido histórico, Almuzara no lo considera un galardón más sino que se va a comprometer con él como el "premio insignia" de la editorial.
La periodista Mercedes de Pablos, como miembro del jurado, ha considerado positivo el predominio de la novela negra entre los concurrentes al premio porque "en este mundo de zozobras, nada mejor que el mal tenga rostro y además acabe mal".
De Pablos también ha señalado que la novela negra es la que mejor retrata a una sociedad, y ha recordado que en convocatorias pasadas eran más numerosas las novelas históricas, mientras que, acerca de la doble convocatoria del Ateneo y el Ateneo Joven, ha apuntado que muchos de los menores de 35 años que concurren lo hacen con estilo clásico y otros de los que se presentan al Ateneo son más rupturistas.
El también editor y presidente de la Sección de Publicaciones del Ateneo de Sevilla, Francisco Prior, ha señalado que una de las obras presentadas trata sobre el botín artístico con el que se hizo durante la Guerra de la Independencia el mariscal Soult, para demostrar que también hay obras documentadas y plenas de conocimientos históricos.
