Fidel Meneses: El Flamenco a través de la Mirada
El fotógrafo y documentalista inaugura en Morón una exposición con alma social y homenaje a grandes figuras del flamenco
Fidel Meneses. Fotógrafo flamenco y social
Morón de la Frontera acoge estos días una exposición singular en el "Callejón del Pescao", protagonizada por el fotógrafo flamenco Fidel Meneses, sobrino del legendario José Meneses. La muestra, que se enmarca en las actividades previas al Festival del Gazpacho Andaluz, se inaugurará oficialmente el próximo 5 de julio con una visita guiada junto al Delegado de Cultura y la Hermandad de los Gitanos de Utrera, como símbolo de hermanamiento entre los festivales flamencos de Utrera y Morón.
Fidel Meneses, cuya trayectoria combina sensibilidad artística y compromiso social, ha dedicado su obra a retratar el flamenco desde una óptica íntima y profunda. Su formación como fotógrafo comenzó de manera casi impulsiva, tras una etapa trabajando en Ibiza, y se consolidó con grandes maestros como Cristina García Rodero y Pep Bonet. Siempre ha defendido la función social del arte, por eso muchas de sus exposiciones se han realizado en espacios públicos, buscando el contacto directo con la gente.
La exposición incluye retratos recientes como el del cantaor Rafael de Utrera, tomado durante el Festival de la Fiebre del Cante, en Marinaleda. También se presentan collages digitales de artistas ya fallecidos o retirados, como Curro de Utrera o El Funi, mediante un trabajo creativo de recuperación visual. Para Meneses, el arte debe estar en la calle, al alcance de todos, y su obra lo refleja con claridad.
Su relación con el flamenco es más que profesional: es vital. Criado en el entorno del cante jondo, la figura de su tío José Meneses marcó su mirada artística desde los inicios. “El flamenco lo tenía tan cerca que fue inevitable convertirlo en el eje de mi trabajo”, explica.
La exposición no sólo retrata rostros del flamenco, sino que también revela historias, emociones y contextos. Para Fidel, su cámara no es solo una herramienta estética, sino una vía para narrar lo que hay detrás del arte: la gente, el entorno y la historia.
Con esta muestra, Meneses sigue trabajando desde lo flamenco tras un tiempo de distanciamiento- reconoce. “Fue como un reencuentro emocional”, asegura. Su trabajo, que combina lo tradicional con técnicas digitales contemporáneas, proyecta una mirada renovada sobre un arte profundamente enraizado.
La cita del 5 de julio será un encuentro entre imágenes, memoria y duende, en un rincón de Morón donde la fotografía también canta.
