Una psicóloga sufre una agresión sexual en la prisión Sevilla II, ubicada en Morón de la Frontera
CSIF traslada su preocupación por el incidente y alerta sobre las condiciones de trabajo en el centro penitenciario, marcado por la masificación y la falta de recursos.

Centro penitenciario sevilla II / Pablo de Miguel

Morón de la Frontera
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha informado, mediante una nota de prensa, de un grave incidente ocurrido en el Centro Penitenciario Sevilla II, situado en Morón de la Frontera, en la mañana del martes 8 de julio de 2025. Según el sindicato, una psicóloga del centro fue agredida física y sexualmente por un interno durante el desempeño de sus funciones.
El agresor es un interno multirreincidente, con 12 ingresos previos en prisión, antecedentes por agresión sexual y actualmente bajo una medida de seguridad. Durante una entrevista en el despacho del equipo técnico, el recluso se abalanzó sobre la profesional, le realizó tocamientos por todo el cuerpo y la golpeó, intentando impedir que pidiera ayuda o abandonara la estancia.
CSIF ha expresado su solidaridad con la trabajadora y ha ofrecido el apoyo de su equipo CSIF Ayuda, que incluye asesoría jurídica y asistencia psicológica.
En el comunicado, el sindicato manifiesta su preocupación por la situación estructural del centro, aludiendo a la escasez de personal, la masificación, la falta de medidas internas de seguridad y la inacción por parte de la dirección, a la que responsabilizan de no haber atendido reiteradas solicitudes de traslado del interno por parte de los equipos técnicos.
Consideran que este suceso es una muestra más del deterioro que vive el sistema penitenciario y reclama la urgente implantación de protocolos de prevención, así como la mejora de recursos humanos y materiales que garanticen la seguridad del personal. También reivindica el reconocimiento del personal penitenciario como agentes de la autoridad.
El CSIF concluye destacando la profesionalidad del conjunto de trabajadores del centro, que —según subrayan— continúan ejerciendo su labor en condiciones difíciles y con escaso respaldo institucional.




