Las universidades públicas andaluzas alertan sobre la “expansión exponencial” de la privatización y reclaman diálogo urgente
Francisco Oliva, presidente de la Asociación de Universidades Públicas de Andalucía, denuncia la aprobación masiva de titulaciones privadas y el retraso de grados clave en universidades públicas

Francisco Oliva denuncia la aprobación masiva de titulaciones privadas y el retraso de grados clave en universidades públicas
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Sevilla
La Asociación de Universidades Públicas de Andalucía (AUPA) ha encendido las alarmas sobre la creciente privatización del sistema universitario en la región. Francisco Oliva, presidente de la asociación, ha denunciado en una entrevista en Hora 14 Andalucía que “el crecimiento del proceso de privatización en Andalucía es exponencial”.
Oliva explica que en muy poco tiempo se ha pasado de contar con una sola universidad privada a tener seis, y que recientemente se aprobaron de golpe 34 nuevas titulaciones en centros privados, algo que “nunca se había dado”. El dirigente universitario advierte que “el problema no es solamente el número, sino también la propia calidad y utilidad de estos títulos”, muchos de los cuales cuentan con “escasísima empleabilidad”.
Un punto especialmente crítico para Oliva es el retraso en la aprobación de grados estratégicos como inteligencia artificial y ingeniería biomédica en universidades públicas de Granada y Jaén, mientras que esos mismos títulos se concedieron a universidades privadas. “Los alumnos van a tener que pagar aproximadamente 11.500 euros al año en privadas, mientras que en las públicas el coste sería aproximadamente 10 veces menos”, señala Oliva, para subrayar la desigualdad que esto genera.
El presidente de AUPA critica además que la Universidad de Granada, “la número uno en España en inteligencia artificial y una de las más potentes de Europa”, no haya recibido la autorización para impartir estos estudios. Frente a esta situación, Oliva hace un llamado al diálogo y al fortalecimiento de la universidad pública: “Hacemos un llamamiento a que hablemos, a que dialoguemos y que intentemos llegar de alguna manera a acuerdos también en esta materia”.
Respecto a la respuesta de la Junta de Andalucía, el representante universitario asegura que “discrepamos con absoluta, por supuesto, lealtad y con un espíritu crítico constructivo”, y defiende la necesidad de “reforzar la Agencia de Calidad Andaluza” para garantizar la excelencia universitaria sin que esta tenga un enfoque meramente sancionador.
Finalmente, Oliva aclara que la asociación no contempla movilizaciones o protestas: “Nosotros tenemos que dialogar y hablar hasta la saciedad con nuestros interlocutores, que son evidentemente los miembros de la Consejería”.




