Usuarios de la carretera Ronda–San Pedro tras cuatro meses cortada: "Ha sido una auténtica pesadilla"

Málaga

“Pasé por la carretera ayer y me sentí como un niño chico el Día de Reyes. Y es una pena, porque lo que nos ilusiona es que nos hayan abierto un solo carril”, así lo resume Fran Valiente, miembro de la plataforma de afectados por el corte de la A-397, al expresar la mezcla de alivio, impotencia y decepción que muchos vecinos de la comarca sienten tras más de cuatro meses de aislamiento. Ya puedes escuchar la entrevista en el programa Hoy por Hoy Málaga.

La carretera A-397 entre Ronda y San Pedro de Alcántara ha reabierto parcialmente tras el grave desprendimiento causado por la DANA de principios de marzo. La vía, esencial para más de 9.000 personas, la mayoría trabajadores que se desplazan a diario a la Costa del Sol, funciona de nuevo con un único carril regulado por semáforo.

Una lucha sin respaldo institucional

Fran Valiente ha sido uno de los rostros visibles en la lucha ciudadana. Pese a ello, ni él ni la plataforma fueron invitados esta mañana al acto oficial de reapertura: “Han venido muchos a hacerse la foto, pero cuando los necesitábamos, no nos prestaron ayuda ninguna”, lamenta. Asegura que durante estos meses no han recibido ni una sola ayuda económica, ni una reunión formal con la Junta ni con la Diputación. “Nos prometieron ayudas al combustible, nos prometieron reuniones… Al final, nada. Pasó la tormenta y se escondieron”, añade.

El coste humano ha sido incalculable según cuenta este rondeño. “Yo pasé de gastar 160 euros en combustible al mes a 450. Perdí horas de vida, tiempo con mi familia. Antes tardaba 40 minutos en llegar al trabajo; con el corte, tardaba más de dos horas. De ida y de vuelta”, cuenta Valiente. Asegura que muchos trabajadores de la zona se vieron obligados a pedir la baja médica, incluso psicológica, debido al agotamiento. “Estoy muy orgulloso de los rondeños que aguantamos esto como pudimos”, dice emocionado.

Un abandono estructural

Valiente critica duramente el estado actual de la carretera y las promesas incumplidas: “Hace cuatro años anunciaron 15 millones para mejoras. ¿Dónde están? Porque no han invertido ni un céntimo”. La vía, explica, lleva tres décadas sin mejoras de fondo: sin carriles lentos, sin buena señalización ni iluminación, con tramos que califica de “tercermundistas”.

A la falta de inversión se suma la mala gestión del transporte público, según denuncia este vecino. “Prometieron más líneas de autobuses, pero en vez de aumentar, recortaron. El único autobús salía a las seis de la mañana, y ni siquiera servía porque los trabajadores entran antes. Así es imposible”, apostilla.

Una reapertura parcial que no basta

Aunque la vía vuelve a estar abierta, solo hay paso alternativo con semáforo. “Si pasas antes de las 7 de la mañana, puedes usar los dos carriles. Pero en cuanto empiezan los operarios, solo uno. Y el estado general sigue siendo muy precario”, explica Fran. Para muchos vecinos, este alivio es insuficiente ante las promesas de una autovía que nunca llegó, y un tren a Algeciras que solo sirve a las mercancías. “A nosotros, nada. Ni transporte, ni atención, ni soluciones”, resume con resignación.

La reapertura parcial de la A-397 no ha cerrado el capítulo para los vecinos de Ronda y alrededores. La indignación permanece: “Los colores políticos me dan igual. Yo lo que quiero son respuestas. Y no ha habido ninguna”, sentencia Valiente.