Helados personalizados para combatir el calor: Bioparc Fuengirola apuesta por polos de fruta, carne e insectos para mejorar el bienestar de sus animales durante el verano
El parque mejora la calidad de vida de las especies en verano para afrontar las olas de calor

Bioparc Fuengirola combate las altas temperaturas con helados personalizados para sus animales
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Cadena SER Málaga
Las altas temperaturas que se registran en la Costa del Sol este verano han llevado a los trabajadores de Bioparc Fuengirola a buscar estrategias con las que mejorar la calidad de vida de sus animales en estas fechas tan calurosas. Una de esas iniciativas es bastante fresquita: helados de fruta, zumos naturales, insectos, carne o incluso sangre, a demanda de cada especie.
Los helados forman parte de un plan de enriquecimiento ambiental diseñado por el equipo técnico del parque para estimular los sentidos y el comportamiento natural de los animales. "A casi todos les encanta el helado, el tener esa sensación de fresquito", asegura Óscar González, segundo Responsable de Zoología de Bioparc Fuengirola. Aunque hay animales a los que no tanto. "Tenemos una chimpancé que no le gusta mucho el helado frío y que lo deja a un lado para que se derrita", cuenta a modo de anécdota. Para ella, la chimpancé, tienen otros recursos para protegerla del calor.
Bioparc Fuengirola lleva años implementando estrategias adaptadas a cada especie en estas fechas. Aumentan las dietas con altos porcentajes en agua, tienen instalados sistemas de lluvia artificial, aires acondicionados, ventiladores y piscinas con agua fresca. "Por ejemplo, tenemos el caso de los pandas rojos que son de zona más fría y nosotros lo que hacemos es cortar ese bambú, lo metemos en cámaras frigoríficas cuatro, cinco o seis horas para que esté muy fresquito y se lo ponemos", explica González.
Los trabajadores usan diferentes indicadores para asegurar que los animales están bien adaptados al calor. "Nosotros tenemos indicadores ambientales, con los que controlamos mucho la temperatura exterior, la humedad si hay tormentas, lluvias... Y también miramos mucho los indicadores físicos. Por ejemplo, si vemos que la frecuencia cardíaca de un animal es un poco más alta, significa que está pasando calor o que beben mucha cantidad de agua", aclara el Responsable de Zoología del parque.
Los visitantes que acudan durante el verano podrán observar estos enriquecimientos en acción y descubrir cómo pequeños gestos cotidianos pueden tener un gran impacto en la vida de los animales.




