Clínica Dental Sanitas Aljarafe: este verano presume de sonrisa sin preocupaciones

El verano es sinónimo de descanso, viajes y momentos al aire libre. Pero también puede convertirse en una amenaza silenciosa para nuestra salud bucodental. Cambios en la rutina, mayor consumo de azúcares y descuidos en la higiene pueden pasar factura a nuestra sonrisa. Para conocer cómo proteger nuestros dientes durante la época estival, hablamos con la Dra. Ángela Pancorbo, especialista en Prostodoncia y Estética de la Clínica Dental Sanitas Aljarafe.

¿Cómo afecta el verano a nuestra boca?

“El verano es una época de disfrute, pero también de cambios”, explica la Dra. Pancorbo. “Tendemos a comer y beber fuera de casa con más frecuencia, aumentamos el consumo de refrescos, helados y bebidas azucaradas, y a veces descuidamos la higiene dental. Todo esto puede favorecer la aparición de caries, sensibilidad e incluso problemas de encías”.

Además, el calor y la deshidratación reducen la producción de saliva, un elemento clave en la protección natural de nuestros dientes.

Los enemigos del verano para nuestros dientes

Entre los principales riesgos estivales, la especialista señala los azúcares y los ácidos presentes en bebidas carbonatadas, zumos envasados y dulces fríos. “Estos productos alimentan a las bacterias que causan caries y erosionan el esmalte dental”, advierte.

Su consejo: “Disfrútalos con moderación y enjuágate la boca con agua después. Y, por supuesto, no sustituyas el agua por refrescos: mantenerse hidratado es clave”.

Higiene dental en la maleta

Para quienes viajan, la Dra. Pancorbo recomienda no olvidar lo esencial: cepillo, pasta dentífrica e hilo dental. “Si no tienes cepillo a mano, un chicle sin azúcar puede ayudar a estimular la saliva. También es útil llevar algún analgésico básico por si surge una molestia inesperada”.

¿El cloro de las piscinas daña los dientes?

Aunque menos conocido, el cloro también puede afectar la salud bucodental. “Una exposición prolongada al cloro, especialmente si no está bien regulado, puede desgastar el esmalte y causar sensibilidad. Es lo que llamamos ‘boca de nadador’. Por eso, es importante enjuagarse bien la boca tras el baño”, señala la experta.

Blanqueamiento dental: mitos y verdades

Con tantas fotos y reuniones sociales, muchos buscan una sonrisa más blanca. Pero cuidado con los remedios caseros. “El blanqueamiento dental es seguro si lo realiza un profesional. El bicarbonato o el limón, por ejemplo, pueden dañar el esmalte de forma irreversible”, advierte Pancorbo. “Siempre consulta con tu dentista antes de iniciar cualquier tratamiento”.

El consejo final: rutina, hidratación y moderación

Para cerrar, la Dra. Pancorbo lo resume en tres claves: “Mantén tu rutina, hidrátate y modera los excesos. Así disfrutarás del verano sin comprometer tu salud bucodental”.