La psicóloga del hijo menor de Juana Rivas sale en su defensa y asegura que su salud física y psíquica "está en riesgo" si es entregado a su padre

Sevilla

Josefa Alganza, la psicóloga de los dos hijos de Juana Rivas, Gabriel y Daniel, ha roto su silencio, perdiendo su anonimato desde 2019, cuando comenzó a tratar a ambos, y ha salido en defensa del menor a falta de horas de que sea entregado a su padre en un punto de encuentro por una orden judicial.

"Con este comunicado abandono mi anonimato hasta ahora elegido, por pensar que mi testimonio debía limitarse, a los cauces oficiales (clínicos, judiciales) en los que he participado hasta ahora y en los que, si se me requiere, podré informar con más detalle", ha asegurado.

La psicóloga ha advertido de que la salud "física y psíquica" del menor "está en riesgo" si se marcha con su padre este viernes. "Hasta ahora me he mantenido al margen, pero conociendo como conozco el caso y al menor, no puedo, ni por razones éticas ni deontológicas seguir guardando silencio y no decir que hay razones de peso para solicitar que el pequeño sea escuchado y se le permita vivir en un ambiente familiar libre de violencia como en los últimos meses", ha añadido, en el comunicado.

Alganza ha asegurado que su participación en el caso de los hijos de Juana Rivas se remonta a 2019, cuando atendió por primera vez a los dos hermanos mientras estaban de vacaciones con su madre. "He emitido en estos años informes en varias ocasiones a la Fiscalía advirtiendo del riesgo para la salud física y psíquica del menor (también de su hermano) de continuar la convivencia con el padre custodio en base al relato de los niños", ha denunciado.