Salomé Leonard: monja misionera y estudiante de UNED Jaén

Estudiar en la UNED es sinónimo de flexibilidad y accesibilidad y fue precisamente eso lo que llevó a la Hermana Salomé Leonard a matricularse en septiembre de 2024 para realizar los estudios de acceso a la universidad para mayores de 25 años.

Natural de Tanzania, la vida y la vocación religiosa la ha llevado a destinos como Jerez de la Frontera o San Sebastián en los trece años que lleva en España. Ahora reside en Jaén desde hace un año, y pertenece a la congregación de las Hermanas Mercedarias del Santísimo Sacramento.

Sobre su vocación religiosa cuenta que sintió “que el Señor me llamaba a la vida activa, a realizar el apostolado por medio de las misiones y a poder servir al pueblo estando fuera”. Actualmente su labor se concentra en el acompañamiento a sacerdotes mayores en la residencia o para acudir al médico, además de llevar a cabo tareas de organización y gestión en el comedor del Seminario de Jaén, o encargarse de la catequesis.

Un servicio a la comunidad o ‘apostolado’ que puede compaginar con sus estudios. Sobre su experiencia como alumna, cuenta que eligió la UNED en Jaén por varias razones: “me lo recomendó una hermana de mi congregación quien me habló de su experiencia positiva y descubrí que la UNED es una universidad prestigiosa, muy valorada en España y con un alto nivel de exigencia académica. Me pareció una opción seria y sólida para formarme y también me atrajo su modalidad a distancia porque me permite compaginar mis estudios con mi vocación religiosa. Por eso gracias a su formato virtual he podido asistir a las clases y resolver dudas desde cualquier lugar y a mi ritmo. Ha sido muy flexible y eso ha sido clave para superarlo y obtener el certificado”.

Le gustaría seguir estudiando en la UNED, y realizar el Grado de Educación Infantil “porque dentro de nuestra misión religiosa trabajamos con niños y jóvenes y creo que es fundamental ofrecerles una formación integral que abarque lo académico, lo humano y lo espiritual”.