El gobierno de Peñarroya-Pueblonuevo acusa a la concejala de Vox de "deslealtad, faltas de respeto y filtración de deliberaciones"

Córdoba

El Ayuntamiento de Peñarroya-Pueblonuevo ha emitido un nuevo comunicado respecto al cese de María José Muñoz, la concejala de Vox, de sus responsabilidades de gobierno —Cultura, Patrimonio Histórico y Turismo—. Esta decisión se produce en un clima de tensión, justo después de que Muñoz denunciara públicamente haber sido "víctima de coacciones y chantajes" por parte de sus ya excompañeros de equipo.

En un comunicado, el gobierno local —liderado por Mariví Paterna (Sí Peñarroya)— ha justificado la medida, alegando que el trabajo colectivo se había vuelto insostenible. El consistorio ha detallado una serie de circunstancias que motivaron la ruptura: desde "comportamientos desleales y una pérdida de confianza" —provocada, según el texto, por la grabación de deliberaciones internas— hasta reiteradas "faltas de respeto y la toma de decisiones unilaterales fuera de sus competencias". También se le reprocha la dejación de funciones y la "atribución individual de logros colectivos con fines partidistas", así como de "acusaciones infundadas hacia el resto del equipo respecto a cuestiones presupuestarias que no fueron debidamente tramitadas por su parte".

La versión del Ayuntamiento choca frontalmente con la de María José Muñoz. La exconcejala, que aseguró haber conocido su cese a través de los medios de comunicación, aseguró en una rueda de prensa que lleva sufriendo "coacciones y chantajes" desde el mes de mayo. Muñoz señaló directamente a la concejala del Partido Popular María Jesús Carreto, y a otro edil, y afirma tener pruebas para respaldar sus acusaciones.

El cese de la concejala de Vox, que fue clave para la moción de censura que desalojó al de la alcaldía al PSOE el pasado mes de enero, marca una fractura en el nuevo gobierno. Esta situación deja al consistorio con una mayoría frágil, poniendo a prueba la capacidad del equipo de gobierno para gobernar con tranquilidad.