La Junta presenta 'Ojo al agua', la campaña para prevenir ahogamientos en las zonas de baño de Granada
La nueva campaña de la Agencia de Emergencia de Andalucía (EMA) para prevenir ahogamientos y accidentes en el medio acuático este verano se ha presentado en La Herradura
La Junta presenta la campaña 'Ojo al agua' en La Herradura / JUNTA DE ANDALUCÍA.
Granada
El delegado del Gobierno de la Junta de Andalucía en Granada, Antonio Granados, ha presentado este lunes en La Herradura la nueva campaña de la Agencia de Emergencia de Andalucía (EMA) para prevenir ahogamientos y accidentes en el medio acuático este verano que lleva por lema 'Ojo con el agua', que se emitirá en televisión, radio, prensa y redes sociales.
Granados ha destacado en una rueda de prensa, acompañado por el alcalde de Almuñécar (Granada), Juan José Ruiz, la importancia de esta campaña, que está configurada como "una potente herramienta que ayudará a concienciar, a informar y en definitiva a salvar vidas".
El año pasado, un total de 102 personas fallecieron ahogadas en Andalucía, de ellas siete fueron en la provincia de Granada, dos en playas y cinco en piscinas u otras acumulaciones de agua, según ha informado el delegado del Gobierno andaluz.
El 112 coordinó en 2024 un total de 402 rescates en playas, mar, piscinas y aguas interiores de Andalucía, un 3% más que en 2023, mientras que en lo que llevamos de año 2025 han sido 169 los rescates, de las que 89 se dieron en playas.
Así, ha instado a que "nadie se confíe" y ha señalado que "a veces puede ser una corriente de agua, una zambullida, el cansancio, o un momentito mirando el móvil mientras se bañan los más pequeños, lo que puede marcar una jornada de tragedia".
Frente a este escenario, Granados ha subrayado que "cada uno de nosotros puede contribuir a que este verano sea el más seguro de nuestras vidas" y ha incidido en que "en que desde la Junta de Andalucía estamos convencidos de que merece la pena invertir en seguridad, en información y autoprotección, pero en esta campaña, andaluces y visitantes son el eslabón más importante".
Ha explicado que la EMA tiene a disposición de andaluces y visitantes una guía para prevenir riesgos en el medio acuático, así como la aplicación para teléfonos móviles y tablets 'Catálogo de Playas' con la ubicación de los puestos de socorro, las torres de vigilancia, canales náuticos o los puntos de reunión ante posibles tsunamis, además de un asistente virtual que puede llevar al usuario hasta la playa o lugar de referencia sobre el que desee consultar.
Estos recursos y otros más están disponibles a través de la Plataforma de Emergencias para la Ciudadanía que la EMA estrenó a principios de junio.
Así, el delegado de la Junta ha aprovechado esta cita para recordar algunos consejos para disfrutar de las zonas de baño con seguridad, como "elegir zonas vigiladas y respetar el color de las banderas resulta clave a la hora de prevenir incidencias; por tanto, bañarse acompañado y en horas y zonas vigiladas es la mejor opción".
Por su parte, el alcalde ha agradecido al delegado la iniciativa de esta campaña "para intentar evitar que no ocurra ninguna desgracia en nuestro litoral, hay que recordar que Almuñécar-La Herradura tiene más de 26 kilómetros de litoral" y ha resaltado que este año se ha iniciado también el servicio de vigilancia, entre las medidas, para que las playas sean seguras.
Las zambullidas suponen la tercera causa de lesión medular en España entre los jóvenes de 15 a 25 años, por ello, la EMA recomienda evitarlas ya sean de cabeza o a bomba, muy especialmente en espacios en los que no se conoce la profundidad o sin visibilidad.
Granados ha explicado que "después de las lluvias de este invierno, los ríos y balsas acumulan mucho material de arrastre por lo que es necesario extremar la precaución incluso en aquellos puntos que se conocen bien, debido a los cambios experimentados en los sedimentos, por lo que no hay que confiarse en ningún momento".
En la playa hay que estar atentos a las condiciones del oleaje, mareas y corrientes, nunca hay que salir de la zona de baño, ni adentrarse solo en el mar. Nadar en paralelo a la orilla facilita salir rápido del agua en caso necesario.
Las corrientes de retorno o de resaca son una importante amenaza de ahogamiento, incluso para los nadadores más experimentados. Se distinguen por aparecer como un canal estrecho con un oleaje más calmado o casi inexistente en medio del agua.
"Desconfía de esas zonas de una misma playa donde el oleaje es menor y el agua parece en calma", ha precisado Granados, quien ha explicado que, en caso de verse arrastrado, hay que hacer señales de auxilio, mantener la calma y no nadar contra la corriente, para salir se debe nadar en paralelo a la playa y, una vez fuera, ir directo a la orilla.
Para evitar choques térmicos es recomendable retrasar el baño si se ha comido o bebido en exceso, si se ha hecho ejercicio o se está fatigado o si se ha consumido alcohol u otras sustancias tóxicas. Si se está dentro del agua y se notan escalofríos, vértigo o zumbidos en los oídos, mareos o malestar, lo mejor es salir de inmediato del agua y en caso de emergencia llamar al 112. Nunca hay que sobrevalorar la condición física, es mejor no arriesgarse, ni ponerse en peligro.
En aguas interiores como ríos, pantanos, piscinas naturales, pozas o playas fluviales hay que seguir al detalle las indicaciones de carteles y advertencias de peligro. Es preferible ir acompañado y seguir los consejos de los socorristas de la zona, además de comprobar la cobertura por si fuera necesario realizar una llamada de emergencia.
En las piscinas, la instalación de barreras y la supervisión del acceso a las zonas de agua reduce el riesgo de ahogamiento. Correr por el bordillo aumenta las caídas y traumatismos, por lo que hay que evitarlo. Mirar a la piscina antes de tirarse evita los choques o accidentes con otros bañistas.
Colchonetas, hinchables y flotadores ofrecen una falsa sensación de seguridad y suelen alejarse de la orilla de forma casi imperceptible. "Ningún dispositivo de seguridad puede sustituir la supervisión de un adulto", ha explicado el delegado, que ha valorado la importancia de enseñar a los más pequeños a nadar cuanto antes y, hasta que lo consigan, que aprendan a flotar y a mantenerse a salvo, resulta esencial.
Hay que vigilar siempre el baño de los más pequeños y no dejarlos nunca solos. Establecer turnos con pareja, familiares o adultos responsables puede facilitar esta tarea. Y hay que mirar al niño al menos cada diez segundos y siempre desde un lugar desde el que no se tarde más de 20 segundos en auxiliar en caso necesario.
Además, es aconsejable alejar juguetes de la orilla porque evita caídas accidentales. La instalación de vallas, cobertores y alarmas de piscina son esenciales en viviendas particulares con bebés y menores.