El Real Oviedo resurge con alma: una lección para el Almería
Un modelo de gestión sin olvidar las raíces del club y contando con su afición

Detrás de cada tarjeta hay un abonado con alma y sentimiento hacia su club. / UD Almería

Almería
Ahora que se acerca el partido de Cristiano Ronaldo salpicado de polémica por pagar los abonados y perder la denominación de Trofeo Juan Rojas, va siendo hora de sacar la cabeza por la ventana y mirar otros modelos de gestión que se mueven a nivel de empresa y respetan la tradición y la filosofía del club. Eneko López Alonso hace un retrato de lo que es a día de hoy el Real Oviedo y se puede fijar y tomar apuntes de ello el club que preside Mohammed Al-Khereiji, porque no todo es dinero y gestión de empresa: los clubes tienen alma como la que proyectan los carbayones que pasaron de Tercera a Primera aguantando todo tipo de penalidades y se salvaron porque dieron vida al club y siempre contaron para la entidad.
La filosofía de los clubes se empieza a perder con esa compra-venta y la llegada de inversores que buscan rentabilidades económicas y deportivas. El papel de la afición ha pasado a un segundo plano y la venta de abonos no es decisiva para la vida de las entidades deportivas. Hoy la propiedad cambia de manos y existen las multipropiedades, pero ha roto moldes el grupo Pachuca, que desde su llegada a Oviedo ha contado con la afición y esta se ha visto reflejada en el capital mexicano que primero salvó la entidad y luego le ha devuelto todo su esplendor con los seguidores de aliados. Los abonados no son meras tarjetas electrónicas ni números para los clubes.
Inversión, profesionalización y respeto por la entidad
Los clubes de ahora ya no viven de la grada ni del amor a unos colores, pero hay que respetar la historia y el sentir de los que han llevado a la entidad hasta nuestros días. Cita Eneko López en Mundo Deportivo que: “En ese cruce de caminos entre pasión y capital, el Grupo Pachuca ha dado forma a una resurrección que parecía utópica. Un grupo extranjero ha devuelto al Real Oviedo al lugar del que nunca debió salir. Y lo ha hecho sin apagar su alma”, no se puede resumir mejor lo que a día de hoy se vive en el Principado de Asturias con el ascenso a Primera recuperando todo el esplendor.
“En 2012, cuando el club se asomaba al abismo, una ampliación de capital histórica atrajo a Carlos Slim. El magnate mexicano, a través del Grupo Carso, invirtió más de dos millones de euros y salvó al club”, cita Mundo Deportivo.En 2022, el Grupo Pachuca tomó el control del club, comprando el 51% de las acciones. Con experiencia en la gestión deportiva y una apuesta firme por la cantera, el grupo mexicano instaló en Oviedo una estructura profesional, sostenible y ambiciosa. Alma y dinero iban de la mano.
El Almería no ha marcado su patrón de club
Si con Turki Al-Sheikh el dinero estaba garantizado porque tenía de sobra y podía comprar a los mejores. La llegada de Mohammed Al-Khereiji es otra historia a tenor de los movimientos de mercado para recuperar dinero y las decisiones de club por encima de todo y de todos, ya que la petición de sus peñistas y aficionados no han encontrado respuesta. Cada club es libre de imponer su forma de gestionar pero no debe de olvidar a los que dieron brillo a su historia. Las empresas no tienen alma y van de números, pero la afición que antes era soberana, no se debe descuidar.
El modelo del grupo Pachuca le puede venir bien al Almería porque en lo económico y en lo social ha sido un éxito y se sienten orgullosos de ello los aficionados del Real Oviedo, que lejos de perder protagonismo, cuentan para todo lo que viene. Ellos que cayeron a Tercera y se resistieron a morir, llegaron antes que el grupo Pachuca para sostener con vida a un club que ha vuelto a Primera. El respeto por la entidad está por encima de todo y si la grada ya no sostiene a los clubes por lo menos que se le atienda cuando algo piden. Las multas por no asistir a los partidos, el olvido a Juan Rojas y hacer pasar por taquilla a sus abonados en un amistoso: puede ser el comienzo de lo que viene.

Tony Fernández
Redactor de Deportes de SER Almería. Llegó a la SER en 1996. Antes, en RNE. Más de 40 años de experiencia...




