El tomistoma, el cocodrilo de hocico alargado que Bioparc Fuengirola ayuda a conservar
El tomistoma, el cocodrilo de hocico alargado que Bioparc Fuengirola ayuda a conservar
Málaga
El pasado 5 de agosto se celebró el Día Internacional del Tomistoma, una jornada dedicada a visibilizar a uno de los cocodrilianos más enigmáticos y menos conocidos del planeta. En Bioparc Fuengirola, pionero en Europa en la reproducción de esta especie, la efeméride se convirtió en una oportunidad para acercar al público la biología, curiosidades y estado de conservación de este singular reptil.
Un cocodrilo “a medias”
El tomistoma (Tomistoma schlegelii), conocido también como “falso gavial”, es un crocodiliano de hocico alargado, originario de las zonas selváticas y ríos de Borneo, Sumatra y Malasia.
Durante años fue clasificado dentro de la familia Crocodylidae, pero estudios recientes lo ubican en la familia Gavialidae, junto al verdadero gavial del Ganges.«Su morro es más ancho que el del gavial, lo que le permite cazar no solo peces, sino también pequeños mamíferos», explica Milagros Robledo, responsable del Departamento de Herpetología de Bioparc Fuengirola.
Camuflaje y hábitos discretos
De color marrón oscuro, este reptil se camufla con facilidad entre la vegetación densa. Vive en zonas boscosas y de difícil acceso, lo que ha contribuido a que sea una especie poco estudiada. A pesar de su tamaño —los machos pueden superar los cinco metros y los 500 kilos—, Robledo subraya que «tienden más a huir que a atacar». En 2022 se documentaron 31 incidentes con tomistomas, pero con muy baja mortalidad.
Éxito reproductor en Fuengirola
Bioparc Fuengirola ha logrado hitos importantes en la cría en cautividad de esta especie: fue el primer parque en Europa en reproducirla, con un éxito inicial en 2005 y otro en 2011.«Las hembras necesitan playas o zonas con abundante materia vegetal para construir sus nidos. En el parque recreamos esas condiciones añadiendo hojarasca y sustrato, para que se sientan cómodas», detalla Robledo. Actualmente el parque alberga un macho y dos hembras, con recintos separados para evitar la competencia por las áreas de puesta.
Un gigante con nombre propio
El macho de Bioparc, apodado cariñosamente Pinocho y cuyo nombre real es René, impresiona a los visitantes con sus más de cinco metros de longitud y 500 kilos de peso. Puede observarse en un recinto con vistas a la zona de restauración, permitiendo que el público disfrute de una bebida mientras contempla a este imponente depredador.
Conservación y ocio responsable
El tomistoma está catalogado como especie En Peligro por la UICN, amenazado por la pérdida de hábitat y la caza furtiva. Programas como los de Bioparc Fuengirola, dentro de la EAZA, contribuyen a su preservación y a la educación ambiental.En verano, el parque amplía su horario hasta las 23:00, ofreciendo la experiencia de recorrer la “selva” de noche, un plan que une ocio y concienciación medioambiental.