Gabriel Ruiz Cabrero, arquitecto de la Mezquita-Catedral: "La restauración dejará el monumento exactamente igual"

Córdoba

El arquitecto Gabriel Ruiz Cabrero, que junto a Gabriel Rebollo lleva años dedicado a su labor de arquitecto conservador de la Mezquita-Catedral, recuerda cómo vivió la noche del viernes 8 de agosto.

"Esto ha sido un susto terrible y la primera vez que entré después del incendio se me cayó en alma a los pies porque era horrible ver esas bóvedas negras, acostumbrado a verlas tan blancas y bonitas. Y luego ver en la capilla que se había desplomado la cubierta fue una cosa espantosa", reconoce Ruiz Cabrero, que después "me di cuenta que afortunadamente no se había perdido nada importante y habíamos tenido una suerte tremenda provocada por nosotros, el Cabildo, los bomberos y la obrería que, sin que nadie les llamara, acudieron", continúa en la descripción de ese día.

El arquitecto ha destacado que no haya tenido daños en la capilla del Espíritu Santo, salvo un poco en la cubierta, al igual que en la de San Nicolás de Bari.

Lo primero que hizo el equipo técnico fue intentar detener cualquier daño y, tras los permisos de la Junta de Andalucía, trabajar en la colocación de una plataforma en la cubierta para retirar la madera quemada y las tejas.

A partir de ahí, pudo acceder tanto la Policía Científica como los propios técnicos para intervenir en los restos de la capilla de La Anunciación.

Hay una columna que se ha avisto afectada por el fuego "aunque no se ha visto afectada la estructura". No obstante, está apuntalada. Ahora se está acometiendo la limpieza de las bóvedas y se ha puesto una "cubierta provisional".

Ya se está elaborando el proyecto de restauración que se someterá a la aprobación del Cabildo y, más tarde, a la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento para que den los permisos e iniciar la reconstrucción.

Los restos caídos del templo irán a un espacio de almacenamiento del Cabildo y se van a estudiar, según señala a Radio Córdoba Ruiz Cabrero. El objetivo es saber cómo esos materiales han respondido al fuego, además de los tratamientos o medidas contra incendios aplicadas.

Ya hay un sistema de extinción por gas en el Archivo (junto al Mihrab) y se va a instalar el sistema de extinción por nebulización en la zona del crucero.

"El fuego no ha sido peor porque las cubiertas que se habían quemado las habíamos restaurado hace cuatro o cinco años y las dimensiones de los pares de las cubiertas y de los tirantes se habían hecho de acuerdo con la normativa vigente y eran más grandes de lo que el cálculo exigen. De ahí que tarden más tiempo en quemarse y hayan permitido la llegada de los bomberos", explica el arquitecto conservador.

"Nosotros hemos sacado muchas conclusiones de este fuego y tenemos que introducir algunas variaciones en el tratamiento de las cubiertas, como dejar zonas para abrir un butrón para la entrada de las mangueras", afirma. Butrones como los realizados de forma improvisada en una de las capillas la noche del incendio.

En cuanto a la columna, se han desprendido pedazos pequeños pero sigue siendo funcional. Según el arquitecto, hay varias opciones, restaurar la misma columna o "hacer lo que siempre se ha hecho que es cambiarla por otra igual de mármol con las mismas características". Es una decisión "de concepto de restauración" tras ver que ambas son técnicamente prácticas. "Analizaremos todas las opciones, las ponderaremos y las pondremos a disposición del Cabildo y se someterá a aprobación de la Junta a través de la delegación de Cultura".

Inversión sin definir

Gabriel Ruiz Cabrero no quiere hablar de tiempos o costes por el momento. No cree que tarden menos de tres meses en redactar el proyecto de restauración. Hay que esperar los análisis de todos los materiales retirados tras el incendio.

La valoración económica dependerá de actuaciones que aún no se pueden concretar.

Zonas de almacenaje

El arquitecto conservador asegura que sí está planificada toda la retirada de elementos de zonas de almacenaje como la que fue origen del fuego. Recuerda que "ya se han liberado" distintos espacios. Incluso, añade, ya estaba planificada la recuperación de esa puerta tras la adquisición de los inmuebles en la calle Encarnación para guardar enseres y las máquinas de limpieza.

"La mala suerte es que el fuego ha tenido lugar ahora y no dentro de seis meses, cuando ya estaba previsto el traslado", asegura Ruiz Cabrero. Y hace referencia al plano realizado durante la etapa del Cardenal Salazar, que ya no contemplaba este lugar como capilla.

Ahora, van a restaurar ese espacio, que es la parte interior a la fachada de la ampliación a Almanzor "que se abrir, como otras puertas del monumentos".

Recuerda que las cubiertas deben seguir siendo de madera "para ser consecuente con los elementos constructivos con los que se desarrolló", con el consiguiente riesgo de incendio. Y además, dice el arquitecto, el edificio requiere de una iluminación distinta, megafonía o sistema de contabilidad de visitantes que necesitan electricidad. Algo que suma riesgos. Por otra parte, necesita ropa para sus actos litúrgicas y también sillas para su actividad. "Es un edificio vivo", concluye. Para todo ello, hay que "compaginarlo" con las medidas de prevención.

Cuando termine la restauración los visitantes "notarán una diferencia muy importante y es que el vestíbulo de la puerta de San Nicolás estará expedito". Puede que en la columna se coloque un elemento para recordar que el día 8 de agosto de 2025 hubo un incendio que afectó al bien en este lugar.