Las trabajadoras del servicio de ayuda a domicilio se manifiestan para defender sus derechos laborales

Palma del Río

Unas 600 personas se han manifestado en apoyo a las 180 trabajadoras de ayuda a domicilio que reivindican que se cumplan sus derechos laborales. La manifestación recorrió las grandes avenidas de la ciudad y desembocó en la Plaza Mayor de Andalucía donde Mireya Punzano expuso las causas de esta protesta. Algunas de ellas son fallos en las nóminas, avisos con solo 8 minutos de antelación, imposibilidad de desconexión digital o necesidad de nuevos uniformes y EPIs.

El servicio que presta la empresa Óbolo en la ciudad no cumple el convenio y necesitan un mayor compromiso por parte del Ayuntamiento según las propias trabajadoras. La alcaldesa, Matilde Esteo, ofreció una rueda de prensa para manifestar su apoyo al colectivo y se mostró dispuesta a mediar entre la empresa y las trabajadoras para que se cumpla el convenio. Indicó que se ha realizado un requerimiento a Óbolo que sigue su curso administrativo.

Ampliar

Cerrar

Aunque llevan dos años con reuniones periódicas con el ayuntamiento, la sensación de estas trabajadoras es que no se avanza porque en cada reunión hay un punto más de incumplimiento de los derechos laborales. Ya se concentraron en enero del año pasado y vuelven a hacerlo porque "no se ha solucionado nada".

Entre los asistentes a la manifestación se encontraban Nicolás Valbuena, concejal de bienestar social y Javier Ruiz, concejal de mayores, miembros del PSOE, de Izquierda Unida y de partidos sin representación. Para Carlos Muñoz, secretario general de los socialistas en Palma del Río, la solución pasa por una vigilancia constante de los contratos que se realizan desde el ayuntamiento y propone que dos asesores jurídicos estén pendientes de estos contratos.

Dice el PSOE que “la ayuda a domicilio no es un favor, es un derecho” y que “existe una falta clara de voluntad política en el proceso” por lo que pide al gobierno actual que “escuche y actúe”.

Por su parte, la portavoz de Izquierda Unida, Ana Ramos muestra su apoyo a los derechos laborales de estas trabajadoras y defiende que este servicio lo rescate directamente el ayuntamiento para que sea un contrato que se preste de forma pública desde la administración municipal.

Al final de la manifestación se vivieron momentos de discusión entre las trabajadoras del servicio de ayuda a domicilio y el concejal de bienestar social que terminó de forma amistosa. Muchas de las trabajadoras manifestaron que si no se soluciona el problema, el siguiente paso podría ser una huelga.