Incompetentes con competencias

Córdoba

Los acontecimientos vividos este verano en España representan la mejor metáfora del peligro de en qué manos dejamos nuestra vida. Todavía no habíamos superado el escándalo de la incompetente gestión de la DANA en Valencia, por parte del gobierno popular de Mazón, que derivó en la muerte de 216 víctimas, mientras su responsable de Emergencias se excusaba diciendo que “no tenía conocimientos ni experiencia para emergencias”. No olviden que Mazón disolvió meses antes la Unidad de Emergencias porque “no mejoraba ni ampliaba los servicios”, y encima achacó la responsabilidad de la DANA al gobierno central.

Como preludio del infernal mes de agosto, el Consejero popular de Gestión Forestal y Mundo Rural de Extremadura, salió a la palestra porque había mentido al no tener ninguna de las titulaciones que decía tener, y parece que tampoco tenía experiencia ni conocimiento de gestión forestal, pero de él dependía la extinción de los incendios de que acabaron con 45.000 hectáreas de bosque y propiedades agrarias. Aunque dimitió por sus mentiras, la presidenta de Extremadura le echó la culpa de todo a Pedro Sánchez.

Y mientras ardía Castilla y León, y su presidente, Madueño, que en 2018 dijo que “mantener el operativo de incendios todo el año es absurdo y un despilfarro”, decía desde Cádiz, donde disfrutaba de la playa mientras ardía Castilla, que su gobierno tenía medios suficientes para combatirlos, aunque al día siguiente le echó la culpa al Estado porque decía que los incendios no eran su competencia. El resultado de su gestión ha sido 141.131 hectáreas forestales y varios pueblos de montaña carbonizados y, lo peor de todo, 4 vidas humanas.

Mientras ocurría todo esto, Moreno Bonilla ni apareció por el incendio de la Mezquita de Córdoba ni por el de Itálica ni por el de Tarifa ni de ninguno otro, aunque tuvo tiempo, eso sí, de echarle la culpa a Pedro Sánchez, mientras solo se mostraba públicamente en corridas de toros y chiringuitos de playa.

La verdad es que resulta difícil determinar si el problema es si las competencias están en manos de incompetentes o si estos solo son competentes en la incompetencia.