Pesar en San Roque por el fallecimiento de Marian Díaz, directora de la Escuela Oficial de Idiomas
Díaz ayudó a que el centro se consolidase en la localidad

Marian Díaz en una foto de archivo / RA

Luto y pesar en el municipio de San Roque después de haberse conocido el fallecimiento de Marian Díaz, quien ha sido durante años la directora de la Escuela Oficial de Idiomas de San Roque.
Marian Díaz dedicó la mayor parte de su carrera a la Escuela Oficial de Idiomas de San Roque y ayudó a que el centro se consolidase en la localidad, además trabajó de manera muy estrecha con la delegación municipal de Educación.

Marian Díaz en una foto de archivo

Marian Díaz en una foto de archivo
Díaz fue la principal impulsora del proyecto Erasmus + en el centro sanroqueño al que le puso mucha ilusión. Sus compañeros destacan su compromiso incansable, su pasión por el aprendizaje y su visión europea que ha dejado una huella imborrable en todas las personas que compartieron con ella este camino. Añaden, que gracias a su impulso, numerosos participantes pudieron vivir experiencias transformadoras que seguirán inspirando a futuras generaciones.
El responso se celebra este jueves a las siete en la capilla del Parque cementerio de Estepona.
HOMENAJE DE SUS ALUMNOS
La Asociación de Alumnos de la EOI, liderada por Víctor Benavides, ha querido trasladar una carta de despedida a Marian Díaz que a continuación reproducimos.
Inmortales.
Y fue así, como en la quietud de sus últimos días, nos recordó la historia de los tres canteros. "Y tú, ¿Qué haces?" - le preguntó al primero- "Yo, picando piedra como un condenado"-respondió. "¿Y tú?"-dirigiéndose al segundo-"Yo perfilo la roca dándole belleza y robustez"-contestó sin apartar la mirada de su obra -." ¿Y tú, qué estás haciendo?"- interpeló con curiosidad al tercero que silbaba mientras trabajaba- Se detuvo un instante el cantero, levantó la cabeza y mirando hacia el horizonte con entusiasmo, como si viera algo allí, contestó: "¿Yo?, construyendo la Catedral de Burgos".
Marián Díaz López, siempre se identificó con el tercer cantero: Una visionaria que construyó catedrales de conocimiento y puentes hacia Europa desde la Escuela Oficial de Idiomas de San Roque. Durante más de quince años al frente de su dirección, transformó no solo una institución, sino la vida de cuantos la rodeaban. Bajo su liderazgo, la escuela se consolidó como un faro de innovación pedagógica y un referente en proyectos europeos, siendo la primera en Andalucía en recibir el reconocimiento a la calidad Erasmus+ en 2019 . Su mirada siempre estaba puesta en el horizonte, en construir algo perdurable.
Era una mujer de una organización meticulosa y una trabajadora incansable, pero por encima de todo, una educadora que creía en las personas. Como directora, siempre estaba dispuesta a dar segundas oportunidades, incluso cuando eso suponía recorrer caminos más largos y tortuosos. Para ella, el equipo humano era el alma de toda organización, y su grandeza radicaba en extraer lo mejor de cada individuo, tejiendo una comunidad unida en torno a la excelencia.
Como docente, inspiró a los alumnos a crear una Asociación de Alumnos, una de las más productivas e influyentes de España que atraía a alumnos de toda la provincia. Los empoderó en la educación no formal, cuando apenas era un pensamiento en los rincones de Erasmus +. “Solo se aprende rápido lo que se enseña con emoción” nos decía. Cada logro profesional era, en el fondo, un acto de fe en el potencial de los demás.
Su legado no son solo los galardones o los programas implantados, sino las incontables vidas que tocó con su generosidad y sabiduría. Sus hijos pueden sentirse profundamente orgullosos de una madre que, entre piedras aparentes, supo esculpir un porvenir lleno de luz y oportunidades para su comunidad. Como ella bien enseñó, la verdadera excelencia no reside en lo que se construye, sino en quiénes se elevan al hacerlo.
Inmortales son aquellas personas, como Marián, que comparten un trocito de su alma y lo siembran con amor en nuestros corazones. Ahí permanece su legado, como una luz que ilumina nuestro camino; mortal, puesto que es llama, pero infinita mientras dure.




