Mollina cierra con música y propuestas la 24ª edición de la Universidad Juventud y Desarrollo

Encuentro de jóvenes europeos en Mollina / North-South Centre of the Council of Europe

Mollina
Mollina ha acogido esta semana la 24ª edición de la Universidad Juventud y Desarrollo (UYD), uno de los encuentros internacionales más destacados del Consejo de Europa. Durante seis días, 240 jóvenes de 78 países han debatido en el CEULAJ sobre inteligencia artificial, seguridad digital y derechos humanos.
“Cuando veo la presión que la tecnología ejerce sobre la gente joven siento miedo por mi hija y por este mundo que cambia tan rápido. Pero esta semana, escuchando vuestras preocupaciones, vuestra creatividad y vuestro sentido de la responsabilidad, he sentido algo más: he sentido esperanza”. La directora ejecutiva adjunta del Centro Norte-Sur del Consejo de Europa, Rocío Cervera, clausuró con estas palabras un evento que durante una semana ha convertido a Mollina en epicentro del diálogo juvenil. El programa ha dedicado, bajo el lema Empoderando a los jóvenes en seguridad digital, un total de seis jornadas a la adquisición de nuevas capacidades en seguridad digital y al desarrollo de competencias en el ámbito del diálogo intercultural.
Cómo usar la IA en migraciones
Nabil Ferdaoussi, antropólogo de origen marroquí, ha presentado la tesis que trabaja junto con UNESCO sobre tecnologías digitales como IA y biometría aplicadas a migrantes desaparecidos, sobre todo en las fronteras españolas. “Estas tecnologías se utilizan fundamentalmente para la identificación, pero están dirigidas a personas vivas. Existe la posibilidad de reorientarlas para migrantes fallecidos y desaparecidos”, ha expuesto durante la UYD.
Konstantina Liontou, una joven empleada de Migración e investigadora griega, ha presentado su investigación sobre cómo la UE integra la IA en las diferentes fases del proceso de petición de asilo.
Ambos participaron en el Foro Euromed de Jóvenes Investigadores, convocado por el IEMed, que ha abordado los retos a los que se enfrentan los jóvenes investigadores en la era digital.
Debatir el futuro para conocer el presente
El PNUD (Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo) ha desarrollado un programa que dota a jóvenes miembros de comités electorales de herramientas para contrarrestar la desinformación, los discursos de odio y los riesgos asociados a la IA en su trabajo.
“La IA también tiene sesgos, y el sesgo no siempre es malo, como cuando elegimos amigos honestos y leales”, expuso en uno de estos ejercicios el hondureño Daniel Vijil, uno de los participantes. Su compañera y compatriota Iliana Licona se mostró a favor, argumentando que “lo que en un país puede ser información en otro puede considerarse propaganda. Y la IA lo distingue de una forma más justa”.
La reflexión sobre derechos humanos también vertebra toda la formación del Centro Norte-Sur en torno a HEY (Human Rights Education for Youth), una herramienta que la propia institución lanzó en 2024 para fortalecer las capacidades de los jóvenes en el ámbito de los derechos humanos, ofreciendo cursos en línea con tutoría que refuerzan la comprensión de los estándares legales europeos e internacionales. Estándares como el Convenio Marco del Consejo de Europa sobre Inteligencia Artificial y Derechos Humanos, Democracia y Estado de Derecho, primer tratado internacional jurídicamente vinculante en este ámbito.
Durante la UYD, YEU (Youth for Exchange and Understanding) ha recopilado, a través de 10 organizaciones de 14 países, recomendaciones de jóvenes europeos con el objetivo de incorporarlas a políticas de seguridad digital. La organización llevará buenas prácticas sobre riesgos de la geolocalización, el uso de IA o la identificación de fake news a Bruselas para que sean incorporadas en políticas comunitarias y otros documentos de referencia.
Diálogo y empoderamiento
La UYD es un punto de encuentro y tiene el diálogo intercultural como uno de sus principales valores. Para Fiona Kuya Davida Ngima, una estudiante de Sierra Leona que lidera un proyecto en su país para empoderar a los jóvenes en la participación en temas de igualdad de género y salud mental, estar en la 24a edición de la universidad ha supuesto viajar por primera vez fuera de su país y también conocer en persona a Rui Teixeira, el compañero belga con el que lo desarrolla. “Estar aquí me ha abierto horizontes”, contó en las jornadas, a las que ha acudido bajo el programa de capacitación para desarrollar proyectos entre África y Europa del Foro Europeo de la Juventud (EYJ).
“Los participantes son muy exigentes con la tecnología. Quieren herramientas que sean didácticas y sociales”, explicó el formador Fred Carreiro sobre la actividad que desarrolla con DYPALL Network. El objetivo ha sido mejorar la capacidad de impactar en políticas locales de los representantes juveniles de consejos municipales asociados a su red. “Necesitan conectar a sus iguales, los jóvenes, con las instituciones que hacen políticas que les afectan, y unir ambos extremos no es nada sencillo”, añade el formador.
En una de las sesiones de la OBESSU (Organising Bureau of European School Student Unions), los representantes estudiantiles, muchos aún en secundaria, se preguntaron cuáles son las barreras para la igualdad de género. “No soy misógino porque mi familia me enseñó a no serlo. Pero me pregunto: ¿qué pasaría si hubiera nacido donde la misoginia es la norma?” o “quienes deciden lo que vemos en redes sociales tienen mucha responsabilidad en esto” fueron algunas de las reflexiones que compartieron.
Uno de los talleres con mayor calado cultural de la semana de la UYD fue el que organizó el centro de diálogo internacional Kaiciid, en el que, además de explorar herramientas para contrarrestar los discursos de odio online y offline, profundizar en identidad, estereotipos y libertad de religión o de creencias, y aprender storytelling, visitaron Córdoba, ciudad de gran significación religiosa y cultural.
Música, siempre
La Universidad Juventud y Desarrollo es diálogo intercultural y pocas cosas hay más universales que la música. En cada cambio de actividad y cada noche, el grupo de animación del evento, la Ubanda, ofreció jam sessions, conciertos, acompañamientos y un gran festival de clausura de la 24a edición de la UYD este sábado por la noche en la Plaza Atenas de Mollina, donde los participantes pudieron conectar con los vecinos del pueblo compartiendo una fiesta de música en directo a beneficio de la ONG local Amidis.




