Multas de chichinabo
En Andalucía, defraudar a los inquilinos sale gratis

La Columna de Rubén Sánchez ( 29/09/25)
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Sevilla
En Andalucía, defraudar a los inquilinos sale gratis. Por si no era suficiente sufrir precios absolutamente disparados por los alquileres de viviendas, por si no era suficiente que la Junta se niegue a fijar los topes en los precios de los alquileres que permite la ley de vivienda, encima se perdonan las multas a las empresa que cometen fraudes masivos.
Han pasado ya más de dos años desde que entró en vigor la prohibición de que las inmobiliarias cobren honorarios a los inquilinos y solo han trascendido públicamente dos multas. Nos hemos enterado de ambas porque se han impuesto como consecuencia de denuncias de FACUA y la Junta ha tenido que informarnos. Son dos multas de chichinabo. De 600 euros la primera y de 1.500 euros la segunda.
Y para colmo, la autoridad de protección de los consumidores -bueno, más bien de desprotección de los consumidores- ha decidido que las dos inmobiliarias pueden quedarse con todo el dinero defraudado. Así, en ninguna de las resoluciones sancionadoras establece el comiso del beneficio ilícito obtenido con el cobro de esos honorarios ilegales.
Así de duro es el Gobierno andaluz con las empresas que cometen fraudes con los consumidores. Porque en realidad da igual que hablemos de inmobiliarias que de bancos, de compañías eléctricas o de telecomunicaciones. Las multas, si es que se les puede llamar multas, son de auténtica vergüenza. Una invitación a seguir robándonos, en resumidas cuentas.

Rubén Sánchez
Periodista y secretario general de Facua.




