Óscar Hidalgo regresa a sus orígenes con Inmanente, una exposición de introspección y madurez artística
Este viernes en la Finca El Coleta

Inmanente de Óscar Hidalgo en la Finca El Coleta
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Algeciras
El artista Óscar Hidalgo vuelve a escena con "Inmanente", su quinta exposición individual, una propuesta que marca un punto de introspección, evolución y reconciliación con sus propios orígenes creativos. La muestra se inaugurará el próximo 17 de octubre a las siete de la tarde en la finca El Coleta, donde permanecerá abierta al público hasta diciembre, con entrada libre.
Programada por Nando Argüelles Art Projects, Inmanente supone un regreso al lugar donde Hidalgo presentó su primera exposición, Inherente. Ahora, convertido en un creador más maduro y consciente, revisita emociones, conceptos y obras del pasado para transformarlos desde la experiencia. “Quería que fuera una conmemoración de aquella primera muestra, pero con el bagaje de todo lo vivido”, explica el artista.
A diferencia de su anterior exposición, La Caja, centrada en la geometría y el control, Inmanente rompe cualquier frontera formal. Hidalgo se entrega al impulso, a lo que nace desde dentro: “No quería límites ni estructuras. Es lo que sale de mí, mis vivencias, mi forma de sentir y de ver la vida y el arte”.
La vulnerabilidad se vuelve protagonista. El artista no teme mostrar sus luces y sombras: momentos de felicidad conviven con piezas de profunda tristeza. Inmanente es, en ese sentido, un viaje emocional.
Algunas de las obras más emblemáticas de sus anteriores etapas reaparecen, pero transformadas. Una de ellas, en su origen titulada Confrontación, reflejaba el choque entre su faceta de cuidador de personas con discapacidad y su labor artística. Hoy, esa pieza renace como Conciliación: “Ahora entiendo que ambas partes se complementan, que soy yo en mi totalidad”.
Otra pieza icónica vuelve con un giro conceptual: el famoso cuadro tapado. Si entonces se ocultaba tras una cortina negra, esta vez se presenta cerrado dentro de una caja. El espectador deberá decidir si comprar una obra sin verla. “Es una elección entre razón y emoción”, dice Hidalgo. La ha titulado Split, en alusión a esa división interna.
Nando Argüelles, comisario y primer espectador de la serie, destaca la vuelta del color y la intensidad narrativa: “Cada obra es como una película. Hay piezas que te impactan de inmediato y otras que necesitas escuchar de Óscar para descubrir su historia”.
Hidalgo también regresa al óleo, tras una etapa en acrílico: “El óleo es con lo que empecé. Quería volver a sentir esos matices”.
La inauguración del 17 de octubre promete ser cercana, sin artificios, fiel al espíritu de la finca El Coleta: un espacio al aire libre, cargado de calma y conexión. “No buscamos impresionar, sino compartir”, apunta Argüelles.
Con Inmanente, Óscar Hidalgo no solo expone una nueva serie pictórica: abre una ventana a su identidad, a su transformación y a la aceptación de todo lo que habita en él.




