Los fabricantes europeos piden más flexibilidad para cumplir la meta de 2035 del coche eléctrico
La patronal de los fabricantes ACEA propone incluir híbridos y combustibles neutros en la normativa y revisar los objetivos de emisiones

Los fabricantes europeos piden más flexibilidad para cumplir la meta de 2035 del coche eléctrico
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Málaga
La Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) ha solicitado a la Comisión Europea una revisión de los objetivos climáticos que establecen la prohibición de vender coches nuevos con motor de combustión a partir de 2035.
La organización, que agrupa a los principales fabricantes de automóviles en Europa, propone que se permita la comercialización de vehículos híbridos enchufables y de modelos propulsados por combustibles neutros en carbono (e-fuels) dentro del marco regulatorio europeo.
ACEA también plantea que el cumplimiento de los límites de emisiones se evalúe en periodos plurianuales, en lugar de hacerlo cada año, para ajustar los calendarios de producción a los ritmos industriales de las marcas.
Otra de las propuestas es la creación de un sistema de “supercréditos” que premie a los fabricantes que vendan vehículos eléctricos pequeños o híbridos de bajas emisiones. Según la asociación, este mecanismo permitiría compensar parte de los costes derivados del proceso de transición tecnológica.
En un comunicado reciente, ACEA señala que la infraestructura de recarga pública en la Unión Europea todavía no alcanza los niveles necesarios para cumplir los objetivos de electrificación. Actualmente existen 560.000 puntos públicos de carga, frente al objetivo de 3 millones para 2030 establecido por la Comisión Europea.
Según los datos más recientes de Bruselas, los vehículos eléctricos representan el 16 % de las matriculaciones nuevas en Europa. La cifra varía según los países, con porcentajes superiores en los del norte y menores en los del sur del continente.
En España, los coches eléctricos suponen alrededor del 12 % de las matriculaciones totales, según datos de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac). Entre enero y septiembre de 2025 se registraron más de 60.000 vehículos eléctricos puros, lo que supone un incremento del 48 % respecto al mismo periodo de 2024.
El parque automovilístico español cuenta actualmente con más de 400.000 vehículos eléctricos en circulación, lo que equivale aproximadamente al 1,2 % del total.
El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) fija como meta alcanzar 5,5 millones de vehículos eléctricos para el año 2030. Para fomentar su implantación, el Gobierno mantiene en vigor los programas de ayuda Moves III y Moves Flotas, con una dotación conjunta superior a 1.500 millones de euros.
Por su parte, la organización ambiental Transport & Environment (T&E) ha advertido de que las modificaciones propuestas por los fabricantes podrían reducir el ritmo de crecimiento de las ventas de vehículos eléctricos en el conjunto de la Unión Europea.
La Comisión Europea ha confirmado que estudiará la revisión del reglamento sobre las emisiones de los vehículos ligeros durante el primer trimestre de 2026.
El profesor Juan Antonio Auñón, profesor de Ingeniería en la Universidad de Málaga y colaborador del programa Autoradio de SER Málaga, considera que la decisión de revisar los objetivos era “inviable desde el principio” y apunta que la Comisión Europea “acabará concediendo” a los fabricantes una ampliación de plazos.
Según Auñón, los principales problemas que dificultan la transición hacia el coche eléctrico son “la falta de convencimiento del cliente, la escasez de puntos de recarga y la falta de competitividad económica de los modelos eléctricos”.
El profesor subraya que el sector “ha centrado la atención en la infraestructura, pero no es el único obstáculo”. “Muchos coches duermen en la calle —explica— y esos vehículos no tienen un punto de carga disponible. Habrá que organizar ese aspecto también”.
Auñón reconoce que el interés de los consumidores ha mejorado, “sobre todo por el vehículo híbrido enchufable, más que por el eléctrico puro”. Recuerda que el propio sector plantea esa opción, junto al uso de combustibles sintéticos, como vía intermedia hacia la descarbonización.
El docente destaca que “la tendencia va hacia una electrificación progresiva, con plazos más realistas y una convivencia prolongada con motores térmicos adaptados a combustibles sintéticos no fósiles”. Explica que estos carburantes ya se encuentran en fase de desarrollo y que la Universidad de Málaga tiene previsto ensayarlos en banco de pruebas con sus alumnos durante este curso.
Finalmente, Auñón advierte que la incertidumbre en la regulación afecta a la inversión industrial y recuerda que “fabricantes europeos están revisando sus planes y retrasando la sustitución total de los motores térmicos”. “El acuerdo —añade— debe situarse en un punto intermedio entre lo que piden los fabricantes y lo que plantean los políticos, con plazos realistas que permitan invertir y planificar”.

Ignacio San Martín
Periodista de Málaga especializado en tribunales y motor. Responsable de 'Autoradio', programa decano...




