Educadores de Escuelas Infantiles se movilizan por el aumento de ratios y la falta de personal
Rivera: "Con estas ratios es imposible ofrecer una educación de calidad"

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Mañana, 21 de octubre, de 09:00 a 09:30 horas, numerosos centros de educación infantil de la provincia de Cádiz y del Campo de Gibraltar mostrarán su apoyo a los profesionales del sector, denunciando una situación que califican de “insostenible”. El motivo principal: el aumento de ratios sin la correspondiente incorporación de personal, lo que, aseguran, compromete la calidad educativa, la seguridad y el cuidado de los niños más pequeños.
Francisco Rivera, portavoz de los trabajadores y de las familias, ha explicado que el problema no es nuevo, pero sí se ha agravado. “Estamos hablando de bebés que pasan de 6 a 8 por aula, niños de un año de 10 a 13, y pequeños de 2 años de 15 a 20, todos atendidos por una sola persona”, denuncia.
Rivera subraya que desde 2010, cuando las escuelas infantiles dejaron de ser simples guarderías para integrarse plenamente en el sistema educativo, las exigencias han crecido, pero no los recursos. “Tenemos proyectos educativos que cumplir, actividades que preparar, un seguimiento individualizado... Con estas ratios es imposible ofrecer una educación de calidad”.
Los profesionales señalan que no solo se está viendo afectado el aspecto pedagógico, sino también el bienestar básico de los niños. “Una educadora sola no puede dar de comer, cambiar pañales, atender caídas o consolar a varios niños al mismo tiempo. Los pequeños necesitan atención individual y afecto”, explica Rivera.
A esto se suma otro problema crítico: la tardanza en cubrir bajas laborales. En muchos casos, los sustitutos tardan más de 20 días en llegar, obligando a unificar aulas y sobrecargar aún más al personal. “La burocracia no puede estar por encima del cuidado de los menores”, reclaman.
A pesar de la alta vocación del personal, la situación está llevando a muchos a sufrir episodios de estrés y agotamiento. “Hay profesionales que terminan de baja por problemas de salud mental. No se puede sostener una responsabilidad así con tan pocos recursos”, afirma el portavoz.
Los trabajadores no rechazan un posible incremento de niños por aula, siempre que se garantice la presencia de dos profesionales por clase. Consideran que esta medida resolvería gran parte del problema y permitiría mantener el carácter educativo de estos centros, evitando volver a un modelo asistencial o de mera guarda.
La concentración de mañana tiene un mensaje claro: defender la dignidad de la educación infantil. “Esto no es solo para los que hoy tienen hijos pequeños. Todos, tarde o temprano, podemos necesitar estas escuelas. Luchamos por una educación temprana de calidad para todos”, concluye Rivera.




