QuirónSalud Infanta Luisa: miopía, hipermetropía, astigmatismo y presbicia, las causas más comunes de discapacidad visual
Los doctores Antonio Uceda y Miguel Contreras, oftalmólogos de la Unidad de Cirugía Láser Ocular el Hospital Quirónsalud Infanta Luisa, alertan de cómo puede afectar a niños y adultos
Los doctores Antonio Uceda y Miguel Contreras, oftalmólogos de la Unidad de Cirugía Láser Ocular el Hospital Quirónsalud Infanta Luisa, en Hoy por Hoy Sevilla
Los defectos de refracción —miopía, hipermetropía, astigmatismo y presbicia— son la patología ocular más frecuente y, sin embargo, una de las más fáciles de corregir. Cuando no se tratan, se convierten en una de las principales causas de discapacidad visual prevenible a nivel global, con consecuencias que van mucho más allá de la salud ocular.
Este lunes han visitado los estudios de Radio Sevilla los doctores Antonio Uceda y Miguel Contreras, oftalmólogos de la Unidad de Cirugía Láser Ocular el Hospital Quirónsalud Infanta Luisa.
Impacto en la salud y el desarrollo
Un error refractivo no corregido puede afectar la vida de una persona desde la infancia hasta la edad adulta. En los niños, la visión deficiente se traduce en bajo rendimiento académico, dificultades para leer y escribir e incluso diagnósticos erróneos de discapacidad de aprendizaje. Además, limita la participación en actividades deportivas y sociales, lo que puede derivar en baja autoestima y aislamiento.
En la edad adulta, la situación no mejora. La miopía elevada, por ejemplo, aumenta el riesgo de desarrollar enfermedades graves como desprendimiento de retina, glaucoma o cataratas. Entre los mayores, la discapacidad visual no tratada se asocia con un mayor riesgo de caídas, lesiones y mortalidad.
Un problema económico y social
Más allá de la salud, la falta de corrección visual tiene un impacto directo en la productividad. Los adultos con errores refractivos no corregidos presentan menor rendimiento laboral, más ausentismo y menos oportunidades de empleo. Según estudios, la corrección adecuada de la visión puede incrementar la productividad hasta en un 32%.
Una solución al alcance
La buena noticia es que la mayoría de estos problemas son prevenibles con un diagnóstico temprano y el uso de gafas, lentes de contacto o cirugía refractiva. Sin embargo, millones de personas en el mundo siguen sin acceso a estos recursos básicos, lo que convierte la salud visual en un desafío prioritario para los sistemas sanitarios y las políticas públicas