Condenada una aseguradora por negligencia en atención que causó la muerte de una paciente

Málaga

La Audiencia Provincial de Málaga ha confirmado la condena a una entidad sanitaria privada por negligencia médica con resultado de muerte en un hospital privado de Marbella, tras el fallecimiento de una paciente de 75 años ocurrido en abril de 2019.

El tribunal ha desestimado el recurso de apelación interpuesto por la aseguradora y ratifica la indemnización de 137.426 euros más los intereses legales del 20 %, lo que elevaría la cantidad total a 273.533 euros, en favor del marido y la hija de la fallecida.

Según la sentencia, se ha considerado probado que la asistencia médica fue deficiente y que no se adoptaron las medidas urgentes necesarias para detener una hemorragia interna y tratar una insuficiencia renal obstructiva, factores que terminaron provocando el fallecimiento de la paciente.

El procedimiento ha sido tramitado por el abogado Damián Vázquez Jiménez, de la Asociación El Defensor del Paciente, en representación de la familia.

Una caída y un diagnóstico inicial incompleto

De acuerdo con los hechos recogidos en la resolución judicial, la mujer había sufrido una caída en Francia el 18 de marzo de 2019, donde fue diagnosticada mediante un TAC de fractura sacra sin desplazamiento y con hematoma.

Semanas más tarde, el 26 de abril de 2019, acudió al servicio de urgencias del Hospital Quirón de Marbella, dentro de su cobertura médica privada, al presentar dolor lumbar, anemia severa, insuficiencia renal aguda y hematomas extensos.

Pese a estos signos clínicos de gravedad, fue dada de alta tras una breve valoración médica, con diagnóstico de lumbalgia, sin que se realizaran pruebas complementarias ni se valorara el ingreso hospitalario.

El tribunal subraya en su sentencia que la paciente presentaba un cuadro clínico complejo que exigía actuaciones diagnósticas y terapéuticas urgentes, las cuales no fueron practicadas en el momento adecuado.

Horas después del alta, la paciente tuvo que reingresar por agravamiento de su estado de salud, con constantes inestables, evidencia de sangrado activo y fallo multiorgánico.

Durante su estancia hospitalaria, los médicos registraron datos clínicos que requerían una actuación inmediata para detener el sangrado del hematoma en el músculo iliopsoas y la pared abdominal, así como una vigilancia estrecha del cuadro renal y de la anticoagulación.

Sin embargo, según se detalla en la sentencia, no se realizó operación alguna que permitiera controlar la hemorragia, ni se llevó a cabo una derivación urinaria que resolviera la insuficiencia renal obstructiva causada por la compresión del hematoma.

A pesar de las transfusiones y tratamientos de soporte aplicados, la paciente evolucionó hacia un shock hipovolémico y falleció el 29 de abril de 2019 tras sufrir una parada cardiorrespiratoria.

Valoraciones del tribunal

La Audiencia Provincial de Málaga indica en su fallo que, en las pruebas diagnósticas realizadas, ya se apreciaba un hematoma expansivo que comprimía la vejiga y desplazaba el recto, provocando una alteración funcional que derivó en una anemia severa y un fracaso renal agudo.

El tribunal considera acreditado que existían criterios de sangrado agudo, como hipotensión arterial y anemia persistente, que no fueron tratados de forma adecuada ni a tiempo.

La sentencia concluye que la actuación médica incumplió los protocolos exigibles ante un cuadro de esas características, y que mantener una actitud conservadora sin medidas activas de control del sangrado constituyó una negligencia médica con resultado de muerte.

Durante el juicio se acreditó que la causa inmediata del fallecimiento fue una hemorragia grave y una insuficiencia renal aguda, derivadas de una falta de intervenciones especializadas y una atención médica deficiente.

Valoraciones de la acusación y de la Asociación El Defensor del Paciente

El abogado Damián Vázquez, representante de la familia, ha señalado que la sentencia pone de relieve la importancia de la diligencia y la supervisión médica en el ámbito privado: "La Audiencia ha confirmado lo que era evidente: existieron síntomas claros de sangrado activo y deterioro renal que exigían actuaciones inmediatas. La ausencia de esas medidas ha tenido un desenlace trágico".

Vázquez ha destacado que esta resolución refuerza la responsabilidad de las entidades sanitarias privadas en los casos de mala praxis médica, y subraya la obligación de garantizar la calidad y la seguridad en la atención hospitalaria.

El fallo de la Audiencia de Málaga ratifica la condena económica y la calificación de negligencia grave, y constata la relación directa entre la falta de actuación médica y el fallecimiento de la paciente, ocurrido tras una evolución clínica que pudo haberse evitado con una intervención a tiempo.