La Ronda norte y la Arqueología
Firma de Opinión de José María Vázquez Teja

Firma de Opinión de José María Vázquez Teja - La Ronda norte y la Arqueología
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Córdoba
La aparición de restos arqueológicos en el trazado del tramo noroeste de la futura Ronda Norte no debería verse como un obstáculo, sino como una oportunidad para redescubrir la memoria de la ciudad y fortalecer su identidad colectiva. La ciudadanía acogerá positivamente esta infraestructura si, de verdad, logra descongestionar el tráfico, reducir la contaminación, mejorar la movilidad y conectar barrios y zonas industriales y se completa su trazado cerrando el anillo. Pero el progreso solo tendrá sentido respetando la legalidad y el legado cultural que nos define, tal como establece la Ley 14/2007 de Patrimonio Histórico de Andalucía.
Antes de mover una sola piedra, la ciudadanía debe exigir par ello una evaluación arqueológica independiente que determine el valor real de los hallazgos. Cosa que se debería haber hecho antes de dibujar la primera línea del proyecto. Ni la paralización indefinida, ni la ejecución precipitada son el camino que debe abrirse en la Ronda. La solución pasa por el diálogo de todos los agentes afectados y con intereses, incluida la ciudadanía y se puede conducir en una mesa de coordinación donde técnicos, arqueólogos, responsables públicos, y representantes ciudadanos y sectoriales trabajen juntos con transparencia y rigor y no como se ha venido haciendo hasta la fecha..
La propuesta es clara: continuar las excavaciones con método científico, documentar los restos según su importancia, conservar y poner en valor lo más destacado y proteger de la forma más adecuada el resto del hallazgo sin tener que volver a enterrarlo generaciones, hay que encontrar la forma de poner al alcance de todos el descubrimiento sin que tengamos que sufrir un Cercadilla 2. Es primordial la información a la población transparente y continua. El desarrollo urbano y la historia no pueden entrar en conflicto , el uno sin el otro no son entendibles y se deben reconciliar para que puedan empezar a formar parte de nuestro presente integrándose en nuestras vidas irreconciliables. Una ciudad moderna puede sin dar la espalda a su pasado, crecer y avanzar con equilibrio, basándose en el conocimiento y respeto por su propia memoria preservándose de los intereses particulares de índole política.

José María Vázquez
Experto en urbanismo.




