En el Almería defiende hasta ‘El Tato’
El equipo no se hunde y le generan pocas ocasiones de gol en los partidos

El Almería ha levantado un muro delante de su portería. / Juan Sánchez

Almería
En ataque son unos “máquinas” que diría David Bisbal y en defensa se salen cuando les ataca el rival y no encuentra un hueco. Le siguen entrando por las bandas pero ya no le hacen daño los centros laterales, porque bajan los extremos y por el centro de la defensa están imperiales Monte y Bonini. Se puede decir sin temor a equivocarse que en el Almería defiende hasta ‘El Tato’, aquel torero que no se perdía ni una corrida ni un ‘sarao’. Van todos a una y Andrés Fernández siempre anda fresco para salvar un gol llegado el momento. Soko y Thalys, que son los delanteros que utiliza Rubi, se ponen el mono de faena en los partidos y el equipo no se parte.
Se empieza a notar todo el trabajo que se hizo en Marbella durante la pretemporada. Ya da igual el que juegue porque el concepto lo tienen aprendido y en las gradas del Mediterráneo se puede ver un partido con el rival dominando sin ponerse de los nervios por la seguridad que transmite el equipo. La jerarquía que le dan los centrales y unos laterales que no suben a lo loco, garantizan partidos para ganar porque el caudal ofensivo del equipo es inagotable. Capaz de meter tres goles en las tres ocasiones que tuvo ante el Eibar. Si Rubi les pedía puntería: van sobrados.
Más que la defensa es la forma de defender lo que está haciendo mejor al Almería. Cuando pierde la pelota la busca el que está más cerca de ella y los delanteros son los primeros que defienden. Soko hizo una primera mitad primorosa a la hora de contener y cuando marque un gol quedará liberado. Hasta Embarba y Melamed ayudan a los compañeros de la zaga y el rival se desespera. Van todos a una y se nota a la hora de encajar, porque el tanto del Eibar fue de estrategia y la ocasión de Martón la tapaba un Andrés Fernández imperial.
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Sensación de seguridad dentro y fuera
El Almería viene de dos temporadas de castigo encajando a las primeras de cambio con una defensa hundida y los rivales penalizando por las bandas. Una sangría de goles en toda regla que ponía de los nervios por igual al equipo y a sus aficionados hasta que Rubi ha dado con la tecla. El equipo seguirá encajando porque la forma de jugar del entrenador catalán permite a sus rivales llegar a la portería rojiblanca. La manta no da para más y sabiendo que atacando llegan muchos cuando hay que contener faltan efectivos y eso se nota.
Ahora defiende hasta el Tato y en la grada hay una sensación de alivio viendo como el equipo no deja pasillos y cuando el rival gana la línea de fondo la pareja de centrales no se anda por las ramas y evita todo el peligro. Bonini es el líder atrás y Nelson Monte ya lucía el brazalete cuando salía del campo Embarba demostrando para lo que ha venido. Otro capitán. El Eibar atacaba sin fin y no generaba ocasiones de gol. Esa es la mejor de las noticias para el entrenador porque delata que se ha trabajado bien en la pretemporada y el equipo se ha ensamblado.
Solidarios en la presión y la marca
Defender no es solo contener atrás bien colocado. La primera defensa del balón la hacen mediante la presión los hombres de arriba que han ganado con el paso de las jornadas. Sergio Arribas suma mucho cuando de presionar se trata y Soko ya es otro Baptistao cuando hay que robar para una transición letal. Defender ya no es la tarea de los que forman la línea de cuatro y si de todos, con un Lopy que abarca mucho campo y roba muchos balones, enseñando a Dzodic el oficio para que de los mejores pases tras robo de balón.
El Eibar solo hizo un gol de estrategia y tuvo mayor posesión de balón a lo largo del partido. Pudo ser mayor la goleada de haber estado finos en las transiciones, pero no todo va a terminar en gol. Hay que sacar la lectura positiva de la victoria ante uno de los huesos de la categoría. Se ganó a base de defender mejor que su rival tapando las líneas de pase y siendo solidarios en la marca. En Segunda no te regalan nada y el Almería se ganó el pan como ya lo hizo en Córdoba, sufriendo. Porque hay partidos donde sumar te lleva a la gloria.
No se hunden como la pasada Liga
La colocación de la defensa es fundamental y en eso ha ganado mucho el Almería que ha dejado de meter el culo en el larguero cuando le vienen mal dadas. Ya no se ven desbordados los cuatro de atrás porque bajan los compañeros y evitan la circulación libre de la pelota. Hasta ‘El Tato’ defiende en los partidos y son conscientes de lo que vale la portería a cero para ganar. El equipo está bien engrasado y sabe a lo que juega. Faltaba ese punto de solidaridad en la marca que ahora tiene, y todo son buenas noticias cuando el equipo va lanzado y transmite a sus aficionados una enorme seguridad atrás, y una pegada propia de los “máquinas” que diría Bisbal.

Tony Fernández
Redactor de Deportes de SER Almería. Llegó a la SER en 1996. Antes, en RNE. Más de 40 años de experiencia...




