Reforzadas las medidas contra la gripe aviar en 20 municipios de la comarca de Antequera
ASAJA Málaga pide calma y garantiza la seguridad del consumo avícola
Gallinas / Jesús Blanco/SER GU
Antequera
ASAJA Málaga ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad ante los casos de gripe aviar detectados en algunas zonas del país. La organización agraria asegura que el consumo de carne y huevos de ave es completamente seguro, y que el sector avícola malagueño opera bajo estrictos controles sanitarios y protocolos de prevención.
Recuerdan que la gripe aviar es una enfermedad infecciosa que afecta exclusivamente a las aves y no se transmite al ser humano por el consumo de productos avícolas. La propagación del virus se produce por contacto directo entre animales infectados o por superficies y materiales contaminados, pero no a través de alimentos procedentes de granjas controladas.
En la provincia de Málaga, las autoridades sanitarias han reforzado las medidas de bioseguridad. En caso de detectarse un foco, se aplican protocolos inmediatos de aislamiento, desinfección y vigilancia, e incluso, si es necesario, el vaciado sanitario de las explotaciones afectadas.
ASAJA ha insistido en que el objetivo de estas actuaciones es garantizar la contención del virus y evitar repercusiones sanitarias y económicas en el sector, uno de los más importantes de la provincia.
20 municipios de la comarca de Antequera afectados
Entre las medidas de prevención adoptadas, se ha ampliado el confinamiento de las aves de corral a cerca de 200 municipios de Andalucía, una veintena están en la comarca de Antequera, una de las zonas más vinculadas a la producción avícola. Los municipios afectados son en concreto Alameda, Almargen, Antequera, Archidona, Ardales, Campillos, Cañete la Real, Carratraca, Cuevas Bajas, Cuevas de San Marcos, Fuente de Piedra, Humilladero, Mollina, Sierra de Yeguas, Teba, Valle de Abdalajís, Villanueva de Algaidas, Villanueva de la Concepción, Villanueva del Rosario y Villanueva del Trabuco.
ASAJA Málaga ha querido destacar el esfuerzo conjunto de ganaderos, veterinarios y administraciones públicas para mantener la situación bajo control y proteger tanto la cabaña aviar como la confianza de los consumidores.
