El sector del motor exige a China las mismas obligaciones tecnológicas que Pekín aplicó a los fabricantes europeos
La patronal Anfac insiste en que los eléctricos importados desde China compiten en un marco desigual y pide a Bruselas reglas simétricas y un plan industrial con financiación real


Málaga
El presidente de Renault España y máximo responsable de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), Josep Maria Recasens, ha pedido a la Unión Europea que exija a los fabricantes chinos el mismo nivel de transferencia tecnológica que China impuso a las marcas europeas cuando estas decidieron implantarse en su territorio. Lo ha hecho durante un encuentro organizado por La Tribuna de Automoción, en el que ha reclamado un marco de reciprocidad que garantice que las empresas que operen en Europa aporten industria, innovación y empleo, y no solo procesos de ensamblaje de bajo valor añadido.
Recasens ha recordado que las marcas europeas estuvieron obligadas durante años a constituir joint ventures en China, ceder tecnología y desarrollar empleo cualificado. Según ha explicado, es necesario un criterio equivalente para evitar que un vehículo producido íntegramente en China, enviado en kits y ensamblado superficialmente en Europa, pueda ser considerado producto europeo. En su opinión, “no se puede venir a Europa a montar cuatro chapas con ruedas”.
A esta reflexión se ha sumado Juan Antonio Auñón, profesor de Ingeniería de la Universidad de Málaga, quien ha respaldado públicamente el planteamiento: “Es lógico fijar reglas del juego. Si tú me pones condiciones a mí, yo te las pongo a ti. No se trata de impedir que vengan, sino de que lo hagan de la mano de una empresa del lugar.”
Auñón ha explicado además que este modelo ya lo aplican numerosos países y que España y Europa se encuentran en un momento clave:“Ahora que los fabricantes chinos están produciendo en Europa y en Andalucía, es el momento de fijar las reglas del juego.”
Sobre los aranceles impuestos por Bruselas, Auñón ha subrayado que su función, bien diseñada, es equilibrar el mercado:“Los aranceles bien planteados son una forma de nivelar condiciones. El mercado tiene que estar nivelado. Si no, se rompe.”
Aunque también ha advertido que los aranceles, por sí solos, no generan tecnología ni empleo: “Los aranceles no crean nuevas tecnologías ni hacen avanzar. La propuesta de exigir transferencia tecnológica es más lógica y con mucha más visión de futuro.”
Recasens ha vinculado esta situación con el momento crítico que atraviesa la industria del automóvil. Ha señalado que el sector es un ecosistema basado en el motor de combustión y que el único vector de crecimiento es el vehículo eléctrico. Auñón coincide: “Los plazos que fijaron los políticos eran inviables. La electrificación necesita acuerdos entre fabricantes y gobernantes.”
También ha señalado que la gran incógnita pasa por los combustibles sintéticos:“ Nadie está en contra del motor térmico, está en contra de las emisiones de CO₂. Si usamos combustibles sintéticos, eliminamos el problema.”
Respecto a la capacidad de Europa para exigir reciprocidad, Auñón sostiene que existe margen real de negociación: “Europa sí está en condiciones de reclamar transferencia tecnológica. Si China fabrica en Europa y aun así vende más barato, es porque aplica tecnologías o modelos de coste que deben cumplirse también aquí.”
Como ejemplo ha mencionado el acuerdo firmado entre una empresa china y Santana Motors en Linares: “Han revitalizado esa factoría. Ese es el camino: proyectos que aporten industria completa.”
El presidente de Renault España ha reclamado además financiación para el Plan Auto 2030, pactado entre el Gobierno y Anfac, y continuidad en los programas de apoyo al vehículo eléctrico tras el anuncio de un nuevo plan que sustituirá al Moves.
En el mismo encuentro, el consejero delegado de Seat y Cupra, Markus Haupt, ha confirmado que la planta de Martorell producirá desde marzo el nuevo Cupra Raval, por debajo de 25.000 euros, al que seguirán otros modelos eléctricos del grupo Volkswagen.
Ambos directivos coinciden en que España mantiene talento, capacidad industrial y un ecosistema preparado para liderar la electrificación, siempre que exista un marco regulatorio estable y que todos los actores, incluidos los fabricantes chinos, aporten valor real a la economía europea.

Ignacio San Martín
Periodista de Málaga especializado en tribunales y motor. Responsable de 'Autoradio', programa decano...




