Francisco Toscano: "Recomiendo a todo el mundo que denuncie porque las fuerzas de seguridad están muy preparadas"

Sevilla

Agentes del Equipo de Respuesta a los Delitos de Odio (REDO) de la Guardia Civil de Sevilla han detenido a una persona por difundir contenidos a través de redes sociales susceptibles de constituir un discurso de odio motivado por razones de género. El presunto autor, "valiéndose de la repercusión que tenía en su comunidad virtual, donde contaba con más de 125.000 seguidores, difundió este discurso con el objeto de fomentar en terceros la hostilidad y discriminación contra todas las mujeres".

Durante las investigaciones en redes sociales, localizaron un gran número de publicaciones y emisiones en directo en las que el detenido "promovía de forma directa al odio".

Precisamente este lunes, el subdelegado del Gobierno en Sevilla, Francisco Toscano, visitó Castilleja de la Cuesta para conocer un proyecto piloto contra la violencia de género desarrollado por la Guardia Civil. La iniciativa, pionera en la provincia, consiste en la creación de Áreas Funcionales VIOGEN por Compañía, centralizando en un Centro de Atención a Víctimas (CAV) la recepción de denuncias, instrucción de diligencias y seguimiento de casos.

Este modelo, ya evaluado en el Aljarafe, busca reforzar la especialización, garantizar atención los 365 días del año y ofrecer un entorno seguro que evite la revictimización. El coronel Emilio Serrano destacó que la reorganización mejora la calidad procesal y libera a las patrullas de tareas específicas. La sargento Adela Millán explicó que el CAV incorpora espacios diseñados para acompañar a la víctima con empatía y privacidad.

Toscano subrayó que el proyecto representa un avance en la protección de las mujeres y se enmarca en las políticas públicas de igualdad y lucha contra la violencia de género.

Las campañas se centran en Andalucia en los jóvenes y en la violencia de género a través de las redes sociales, además de en la violencia vicaria donde el objetivo es la mujer a través de sus hijos.

Una de las modalidades de violencia de género en internet es el 'creepshot' que, en el ámbito del acoso digital contra la mujer se ha traducido como 'rastrero'.

Se llama así a las fotos de partes íntimas del cuerpo de la mujer (escote, glúteos, piernas…) tomadas sin consentimiento y difundidas en línea. Tiene dos subcategorías: el 'upskirting' (imágenes sexuales captadas debajo de la falda o el vestido sin que la chica se percate) y el 'downblousing' (cuando captan la zona del pecho). Como las víctimas no se dan cuenta de que están siendo fotografiadas no hay datos de cuántas lo han sufrido.

Así que podrían ser más las mujeres que han vivido algún tipo de acoso o violencia digital, un 73% según el estudio 'Violencia contra mujeres, niñas, niños y adolescentes en el ámbito digital', realizado por la Asociación de Mujeres Juristas Themis y publicado por el Ministerio de Igualdad.