Alberto García, las mágicas manos de Peyo Competición
Amador Jaén tiene en Alberto a su principal valedor cada vez que comienza una temporada
Entrevista a Alberto García en Ser deportivos
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Jerez de la Frontera
Con muchos altibajos y con una temporada “más difícil de lo esperado”, el equipo de Peyo Competición ha puesto punto y final a su aventura automovilística este año 2025 con su participación en la V Cronometrada de Zahara de la Sierra. Para todos los que forman parte de esta “gran familia”, como la describe siempre Amador Jaén, esta temporada ha sido un “verdadero premio”, al cumplir, a pesar de los inconvenientes, todos los objetivos marcados. Se han proclamado campeones del Trofeo de Históricos del Campeonato de Andalucía de Montaña y han terminado terceros en el Open Provincial.
En el circuito de Jerez, durante sus primeros años, el equipo junto al pequeño Alberto García jr
En el circuito de Jerez, durante sus primeros años, el equipo junto al pequeño Alberto García jr
El veterano piloto jerezano sigue estando al volante del famoso ‘Soplillo’ y detrás un equipo, el de Peyo Competición, capaz de sacar el mayor rendimiento posible a un vehículo histórico con los achaques normales de la edad, pero que parece nuevo en manos de Alberto García, jefe del equipo y un mecánico con una enorme experiencia a sus espaldas.
Alberto y Amador forman un binomio casi perfecto
“Llevamos toda la vida juntos, desde niño, es mi compadre”, recuerda el mecánico en Ser deportivos. De hecho, “el único que le ha tocado el coche prácticamente he sido yo”. El piloto jerezano ha depositado siempre toda la confianza en las manos y la sabiduría de Alberto, “siempre me consulta cualquier cosa y sacamos siempre conclusiones entre los dos, pero siempre soy yo, digamos, el que aporta el tema técnico”. Ha terminado una temporada dura, “porque los presupuestos siempre están muy ajustados y hay que estar permanentemente pendientes de las revisiones, la puesta a punto y todo lo que necesita el coche, pero lo mejor es que llevamos mucho tiempo con él, y más o menos ya lo vamos conociendo, aunque al final de temporada dio un poco de lata. Se reparó, pero había una avería oculta que nos costó un poco trabajo de encontrarla”.
Alberto García con mono azul durante una carrera en Puerto Banús a finales de la década de los 80
Alberto García con mono azul durante una carrera en Puerto Banús a finales de la década de los 80
Explica preguntado por esos problemas que “eran del bloque motor, había unas medidas que no estaban dentro de los márgenes establecidos y teníamos problemas con la junta de culata, que se nos fue, pero al final, a base de medir y medir, nos dimos cuenta que el bloque tiene ya muchos años, con materiales antiguos, que había que renovar. Todo lo que encontramos era de segunda mano y había que intentar ponerlo al día.
Alberto pone en valor la gran familia que han formado con mecánicos, pilotos, patrocinadores y colaboradores, “gente siempre muy de nuestro entorno, con ilusión, como la que tiene cada año, a pesar de su veteranía Amador, que nunca se cansa de competir”.
