El Almería cae en Ceuta con polémica arbitral (3-2)

A veces las quejas tienen recompensa, y José Juan Romero empezó a ganar el Ceuta-Almería desde Riazor. Señaló a los arbitrajes, al VAR, a los descuentos, y como en el fútbol los colegiados también deciden partidos, Morilla Turrión le echó un cable a los suyos. Sí le honra al entrenador 'caballa' decir en rueda de prensa que "según me dicen nos pitan un penalti que no es". La actuación de un joven debutante en Segunda que borró del mapa al Almería con un discutido y polémico penalti de Bonini a Anuar que ni siquiera vio él, ya que se fio del línea. Saca boleto el italiano en una disputa sin balón con Anuar -ambos se agarran-, pero el lateral del Ceuta está más vivo y se tira al suelo. En principio la jugada sigue, cuando de repente el navarro se gira y pita pena máxima.

Horrible decisión del colegiado

Incredulidad rojiblanca que se transformó en indignación cuando el colegiado ni se acercó al VAR para revisar la acción. En la sala De la Fuente Ramos no quiso protagonismo y tras varios minutos de diálogo, prevaleció la decisión inicial de pitar penalti. Para terminar de desquiciar al equipo, una clara falta a Dzodic cerca del área en el descuento que terminó en nada. Un partido que iba para empate acaba en derrota polémica. Ahora Romero no se quejará. Y revisión eterna del 2-2 de Arribas. Algo no olía bien.

De las quejas al beneficio

Esta derrota duele más por el arbitraje, por las formas, que por la clasificación. El equipo regaló el 2-1 de Marcos Fernández perdiendo la pelota en un saque de banda y dejando al delantero definir con claridad; empató Arribas con un testarazo que apagó el Alfonso Murube, y cuando todo apuntaba a la remontada, ese penalti que solo aparece en la cabeza de los árbitros. Esta vez el VAR que se quedó sin luz en Riazor para el Ceuta funcionó de escándalo. No entienden en el Almería que ni se acercara al monitor.

El Almería pierde una gran ocasión

Oportunidad perdida para colocarse líder con un tropiezo que frena en seco la gran dinámica de resultados, aunque en el juego el equipo sigue siendo sólido como siempre. Nada va a cambiar en el esquema de Rubi, aunque igual se plantea alzar la voz más de la cuenta cuando toque sabiendo que se suele obtener recompensa con ciertas decisiones como la del penalti que transformaba Rubén Díez, que también se excede en la celebración.

Los árbitros siguen perdidos

Decía Dani Garrido, director de Carrusel Deportivo a nivel nacional, que estamos “ante los años con peor calidad arbitral en España” e igual no va desencaminado. Puede ser que el videoarbitraje les confunda o no tengan claras las reglas, pero el debutante Morilla Turrión no puede pitar ese penalti nunca. Ellos también se equivocan como los futbolistas. Una acción a kilómetros de la pelota y en la que ambos se agarran. No se entiende.

Un pequeño tropiezo en el camino

Los cambios, el sistema, las ocasiones… Todo pasa a un segundo plano cuando igual tendrías un punto más en la clasificación que te llevaría al segundo puesto. No, serán 28 y el sábado contra el Huesca habrá que olvidar el resultado y el penalti polémico. Indignación rojiblanca y alegría para un Ceuta que pudo dedicar el triunfo al cielo para Manolo Carreto, que fallecía el 9 de noviembre.