El inicio de las multas en la ZBE obliga a miles de malagueños a replantear su movilidad: el caso de Inmaculada
Su coche carece de etiqueta ambiental y queda entre los 142.000 vehículos que no podrán entrar en la ZBE, un cambio que deja sin alternativas a quienes dependen del vehículo para trabajar

Cámaras en el centro de Málaga / SER Málaga

Málaga
Inmaculada vive en Rincón de la Victoria, trabaja en pleno centro de Málaga y dispone de un aparcamiento en la capital. Además, acude con frecuencia a Málaga para acompañar a sus padres a consultas y revisiones médicas. A partir del 1 de diciembre, su coche —sin distintivo ambiental— no podrá acceder al perímetro de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE), y hacerlo implicaría una multa de 200 euros. Su caso refleja la situación de alrededor de 142.000 coches y 33.000 motos de la provincia que también quedan fuera desde ese día.
Lleva un año realizando trámites para intentar cumplir con la ordenanza. Primero trató de domiciliar el vehículo en Málaga y cambiar el recibo del impuesto de circulación, aunque una incidencia con la Dirección General de Tráfico complicó el proceso. “He realizado durante el último año múltiples gestiones tanto para domiciliar los vehículos como para pagar el impuesto de circulación en Málaga”, explica. Finalmente consiguió registrar el coche en el padrón municipal, pero cuando presentó una instancia al departamento de Movilidad, la respuesta ha sido negativa. “Me contestaron con fecha de ayer que me desestiman la solicitud”, indica.
La ordenanza exige que el vehículo esté censado en Málaga antes de la entrada en vigor de la ZBE. Haber realizado el trámite con posterioridad deja su coche fuera de la norma, y no existen excepciones por motivos laborales, sanitarios o por disponer de plaza de aparcamiento en el centro. “Ellos no contemplan el destino a donde vas… tampoco contempla el motivo, o sea, si tú vas a trabajar o vas a hospitales eso tampoco está contemplado”, resume.
La concejala de Movilidad del Ayuntamiento de Málaga, Trinidad Hernández, confirma esa interpretación. En declaraciones integradas durante la entrevista, sostiene: “La ley no discrimina si va a trabajar o de ocio… tampoco se discrimina si va a un aparcamiento. El control se limita a verificar si el vehículo tiene autorización para circular”.
A partir del domingo, Inmaculada no podrá entrar en el centro de Málaga. Lo asume con frustración. “Es una medida que veo totalmente injusta, porque si lo que se valora es el vehículo, entiendo que contamina igual un vehículo sea de propietario de Rincón de la Victoria o de Málaga”, afirma.
La duda sobre si podría acceder con su coche para acudir a hospitales dentro de la ZBE ha sido otra de sus preocupaciones. La concejala señala que los centros públicos quedan fuera del perímetro, aunque reconoce que algunos se sitúan a escasos metros de la frontera. Inmaculada coincide: “Los hospitales están fuera, pero el Hospital Civil, por ejemplo, está en el límite… es que con vehículo no puedes llegar a un aparcamiento cercano, lo veo muy difícil”.
La alternativa natural sería el transporte público. Pero para ella no es viable. “He estado 15 años viniendo en transporte público del Rincón a Málaga y tuve que dejarlo por la masificación… a veces los autobuses ni siquiera paran porque van llenos”, lamenta. Explica que la falta de horarios que permitan llegar puntualmente al trabajo impide plantear ese cambio de manera realista. “Con una incertidumbre total de si podré llegar cada día a mi trabajo correctamente”.
La otra opción, cambiar de coche, tampoco resulta accesible para ella. “Estuve mirando los precios… un coche etiqueta ECO o Cero no baja de 30.000 euros”, señala. Siente que la ordenanza la empuja hacia una inversión que no puede asumir: “Es algo a lo que te están obligando entre comillas porque no te dan alternativas”.
Su caso refleja la situación de miles de conductores que dependen del coche para trabajar, atender a familiares o acceder al centro sanitario más cercano y que, desde el 1 de diciembre, quedarán excluidos del centro de Málaga por no disponer de la clasificación ambiental necesaria. Una realidad que, para muchos ciudadanos, abre un dilema complejo: asumir un coste de sustitución del vehículo, reorganizar su movilidad o renunciar a acceder al corazón de la ciudad.

Ignacio San Martín
Periodista de Málaga especializado en tribunales y motor. Responsable de 'Autoradio', programa decano...




