Arahal se rinde a su Virgen: la Medalla de Oro ya reposa en el corazón de los Dolores
La Medalla de Oro de la Ciudad reconoce la fe viva que custodia la Hermandad del Santo Entierro desde hace generaciones

Andrés GR

Arahal
Rafael Martín Martín, cronista oficial de la Ciudad - Comentario nº 92

Rafael Martín Martín - medalla de oro de la ciudad de Arahal a la Virgen de los Dolores - Comentario 92
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Hoy os traigo un comentario sobre un acto vivido en el día de ayer en nuestra localidad la imposición de la medalla de oro de la ciudad a la Virgen de los Dolores, concedida por el Excmo Ayuntamiento a la Hermandad del Santo Entierro
Esta concesión constituye uno de los acontecimientos más trascendentales que la localidad ha vivido en el ámbito religioso, cultural y patrimonial en toda su historia reciente. Este honor no es solo un gesto institucional ni un reconocimiento protocolario: es la afirmación solemne de un vínculo profundo, arraigado y centenario entre un pueblo y la Madre que ha velado por él desde tiempos inmemoriales. La decisión adoptada por unanimidad en el pleno municipal del 5 de diciembre de 2024 fue la voz unánime de Arahal diciendo “sí” a su propia memoria, a su propia identidad y a su propia alma.

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Con tal motivo, la Hermandad puso en marcha una serie de actos previos, en los que destacó la presentación del cartel anunciador de esta efemérides, obra de Antonio Bohórquez Salvador.


Pero el sentimiento de este homenaje alcanzó su punto más alto en el día de hoy, 30 de noviembre de 2025. Este día, durante una Solemne Misa de acción de gracias presidida por Monseñor Teodoro León Muñoz, obispo auxiliar de Sevilla, en la iglesia de San Roque, se llevó a cabo la esperada entrega de la Medalla de Oro a Nuestra Señora de los Dolores. Fue
una jornada en la que fe, historia y emoción se unieron para escribir una página imborrable para Arahal.
San Roque, un templo lleno de emoción
La iglesia de San Roque amaneció distinta. Quienes cruzaron este día el umbral del templo sintieron que no entraban solo en un edificio sagrado; entraban en el corazón mismo de la historia devocional de Arahal. El olor del incienso, la luz tamizada por los cirios, la música sagrada que llenaba el espacio con cadencias suaves y profundas, el murmullo orante de los fieles, todo colaboraba para crear un ambiente de reverencia que envolvía cada piedra del templo
En el presbiterio, la Virgen de los Dolores entronizada bajo la belleza de su palio, esperaba serena, majestuosa, con ese dolor contenido que no desespera, sino que consuela. Sus manos entrelazadas, tan características, tan únicas parecían sostener y elevar al cielo las súplicas de su pueblo. Su policromía antigua, de sabor clásico y hondura espiritual y con un brillo especial, parecía adquirir una nueva vida bajo la luz de este día extraordinario.

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La iglesia acogió una solemne Misa de acción de gracias presidida por el obispo auxiliar de Sevilla Monseñor D. Teodoro León a quien acompañó D. Alejandro Gordon, director espiritual de la Hdad del Santo Entierro y Párroco de Santa María Magdalens. La celebración, marcada por un ambiente de profunda emoción y recogimiento, reunió a numerosos fieles y autoridades civiles y militares, representaciones del Consejo General de HH y CC, Hermandades, congregaciones y asociaciones religiosas de la localidad.
Durante toda la ceremonia, el coro de la Hermandad brilló con una actuación majestuosa, ofreciendo una interpretación cuidada y profundamente espiritual que realzó cada momento de la liturgia y envolvió el templo en un clima de solemnidad y belleza.
Un acto lleno de significado
Al finalizar la Misa, se procedió al acto institucional. El Teniente de Alcalde y Delegado de Cultura, Manuel Alberto Sanromán, leyó el acta que recogía el acuerdo de concesión de la Medalla, felicitando al pueblo y a la Hermandad por su fidelidad y ejemplo. Después, el alcalde Francisco Brenes dirigió unas emocionadas palabras, recordando la historia compartida por Arahal y su Madre Dolorosa, y agradeciendo su presencia constante desde hace siglos.

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La imposición: un instante eterno
Llegó entonces el momento más significativo: la imposición de la Medalla de Oro. El alcalde entregó la distinción al Hermano Mayor quien a su vez la di a Monseñor Teodoro León. Él la bendijo y, con solemne respeto, la colocó sobre el pecho de la Virgen. En ese instante, el templo completo quedó sumido en un silencio lleno de emoción. Muchos fieles no pudieron contener las lágrimas; otros inclinaban la cabeza, sobrecogidos por la intensidad del momento.
La Medalla reposó justo bajo el corazón de plata que simboliza los Siete Dolores de María. Oro y plata se unieron así en una imagen que sintetizaba lo humano y lo divino, lo que Arahal entrega y lo que la Virgen representa. Fue un abrazo espiritual entre un pueblo y su Madre.

Andrés GR

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La Virgen de los Dolores: alma e identidad de Arahal
Y es que la Virgen de los Dolores no es solo una imagen. Es memoria viva. Es historia compartida. Es refugio para quienes sufren, consuelo para quienes lloran, esperanza para quienes buscan luz en medio de la oscuridad. Su rostro, cargado de dulzura y dolor contenido, ha sido espejo del alma de Arahal durante generaciones.
Ante Ella han rezado los mayores, han aprendido a orar los niños, han encontrado paz los afligidos y han dado gracias quienes han visto cumplidas sus súplicas. Ha sido compañía en el duelo, fuerza en la enfermedad, abrazo en el desconsuelo y alegría en los momentos de renacer.
Por eso, cuando la ciudad le entrega su Medalla de Oro, no está distinguiendo a una escultura, sino reconociendo una presencia materna que ha caminado junto a su pueblo desde hace más de tres siglos.
Una Hermandad fiel y constante
La Hermandad del Santo Entierro, cumbre de la sobriedad y del recogimiento, ha sido guardiana de esta joya devocional con fidelidad infatigable. Incluso en épocas de dificultad, incluso cuando la corporación pasó por momentos de menor actividad o visibilidad, nunca se apagó la devoción a la Virgen de los Dolores. Los hermanos supieron mantener viva la llama, conservar los ritos más antiguos y adaptarse con humildad y respeto a los tiempos modernos. Su historia es un ejemplo de perseverancia, de amor silencioso, de trabajo discreto y de dedicación humilde.
La voz de la Hermandad
Al término del acto, el Hermano Mayor tomó la palabra para agradecer este reconocimiento y expresar lo que significaba para todos los hermanos y devotos. Recordó la trayectoria de la Hermandad del Santo Entierro y el papel fundamental de la Virgen de los Dolores en su historia, siempre como referente espiritual y como símbolo vivo del amor de un pueblo. Sus palabras, llenas de emoción y gratitud, reflejaron el sentir de toda la Hermandad.
Un símbolo que permanecerá para siempre
Hoy hemos vivido un acontecimiento inenarable en la imposición de este símbolo que es mucho más que un reconocimiento: es un “gracias” pronunciado por miles de voces. Es la expresión del amor de todo un pueblo que dice: Madre, eres parte de nosotros.Madre, gracias por tu consuelo. Madre, quédate siempre en Arahal.
Desde hoy 30 de noviembre de 2025, la Virgen de los Dolores lleva sobre su corazón la gratitud de Arahal. Una gratitud que no se desgasta porque no nace del oro, sino del cariño profundo de su gente.
Arahal se reconoce en Ella
La Virgen de los Dolores es identidad, serenidad y esperanza. Es hogar. Por eso este día no ha sido una simple efeméride: ha sido un acto de amor y de justicia.
La proclamación solemne de que Ella seguirá siendo, para siempre, el corazón devocional de Arahal.

Andrés GR

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Sonia Camacho
Sonia Camacho es directora de Bética de Comunicación y fundadora de Estudio 530. Comunicadora andaluza...




