Desarticulada en Marchena una red de trata de seres humanos
Los seis detenidos han quedado en libertad. Uno de ellos supuestamente violaba a dos mujeres de forma reiterada
Pedro Gil: "El modus operandi de este grupo se basaba en el control absoluto"
Sevilla
La Guardia Civil ha desarticulado en localidad sevillana de Marchena una organización criminal dedicada a la trata de seres humanos con fines de explotación laboral. En total, 14 personas han sido liberadas. Sus supuestos secuestradores también se encuentran en libertad tras haber pasado a disposición judicial. A uno de los detenidos se le atribuye, adicionalmente, un delito de agresión sexual continuada sobre las dos denunciantes iniciales.
Las actuaciones se iniciaron el pasado 7 de octubre, tras la recepción de una información anónima, alertando sobre la posible retención ilegal de una mujer. Las primeras pesquisas permitieron localizar a las primeras víctimas, corroborando "la situación de vulnerabilidad, malos tratos y restricciones de libertad que estaban sufriendo bajo el control del grupo criminal".
La organización captaba a sus víctimas en sus lugares de origen bajo la falsa promesa de un contrato laboral en la recolección de aceitunas. Una vez en España, se les imponía una deuda inicial de 2.000 euros, la cual se incrementaba semanalmente de manera arbitraria, generando "un mecanismo de esclavitud por deuda que imposibilitaba su liberación".
El modus operandi del grupo criminal se basaba en el control absoluto y la coacción. A las víctimas se les retiraba la documentación personal, se les impedía la libre circulación y se las obligaba a trabajar en jornadas extenuantes sin contrato y percibiendo salarios muy inferiores a lo estipulado. Además, los responsables de la red empleaban la violencia física y las amenazas, advirtiendo a las trabajadoras de que serían enviadas a Alemania para ser explotadas sexualmente si intentaban huir o acudir a las autoridades.
Tras establecer un dispositivo de vigilancia y seguimiento, la Guardia Civil, en coordinación con la Inspección de Trabajo, interceptando a los integrantes de la red en dos fincas agrícolas del término municipal de Marchena.
Durante la intervención, se constató que los trabajadores realizaban sus labores de forma irregular y residían en una vivienda que presentaba condiciones de habitabilidad penosas. La operación ha permitido la identificación y protección de catorce víctimas de explotación laboral. Los detenidos tenías edades comprendidas entre los 28 y los 43 años.