Málaga espera recaudar por multas de tráfico casi 18,5 millones de euros el año que viene

Málaga

El equipo de gobierno del PP en el ayuntamiento de Málaga espera recaudar por multas de tráfico 18.485.530 euros durante el año que viene, según se recoge en el proyecto de presupuestos de la ciudad para 2026.

La cifra ha subido en 1.332.710 euros con respecto a este año, cuando las previsiones de recaudación son de 17.152.820 euros por multas vinculadas a infracciones de la ordenanza de circulación.

Los datos del presupuesto revelan además una subida de los ingresos proyectados por impuestos directos e indirectos, multas, tasas, transferencias corrientes e ingresos patrimoniales. Por estos conceptos se prevén ingresar en las arcas municipales 1.092 millones de euros, que son casi 49 millones de euros más que la recaudación proyectada en este ejercicio.

En concreto, se prevén 6,4 millones más de recaudación por impuestos directos, 5 millones más por impuestos indirectos, 3,6 más por tasas y multas y 4,6 millones de incremento por ingresos patrimoniales. El capítulo que más crece es el de transferencias corrientes, que incluye el dinero que recibe el ayuntamiento de Málaga de otras administraciones y que pasa de 443 millones de euros en 2025 a 472 millones en 2026, casi 29 millones de euros más.

Pero si sube el mayor grueso de los ingresos, ¿por qué baja en 23 millones de euros el presupuesto global para 2026? Por dos motivos fundamentales: bajan a la mitad las trasferencia de capital, que se quedan en 12 millones de euros, pero sobre todo porque el equipo de gobierno de Francisco de la Torre pide el año que viene mucho menos dinero a los bancos: de 149,5 millones de nuevos préstamos para este año pasa a casi 89 millones en el ejercicio próximo, es decir, 60,5 millones menos.

La oposición denuncia afán recaudatorio

Desde el grupo municipal Con Málaga, la portavoz adjunta, Toni Morillas, sostiene que esta cifras constatan "que el presupuesto de 2026 tiene un claro afán recaudatorio", que vincula a las sanciones de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) y a la puesta en marcha del semáforo radar -foto-rojo- que en el primer mes ha multado a 1.500 conductores.

Morillas considera "especialmente grave" que no se use el dinero de sanciones de tráfico para implementar políticas de movilidad, como por ejemplo, los aparcamientos disuasorios, que permitirán dejar el coche junto a las cabecera de las líneas del metro para llegar al centro en el suburbano. Medida que ha cobrado especial importancia por la entrada en vigor de las multas de la ZBE. La viceportavoz de la confluencia de IU y Podemos critica de hecho que el presupuesto sólo recoja 300.000 euros para estudios técnicos vinculados a dichos aparcamientos, una cantidad que considera claramente insuficiente para ponerlos en marcha.